La araña que teje los sueños ha consultado de nuevo al Oráculo. Este se haya oculto en una de las cuevas de la ladera sur de Sierra Nevada, territorio de brujería. Quiere saber cuáles son los pueblos más bonitos de la Alpujarra granadina. La misión se la encargado la hechicera Baba Yaga: si el suyo no está entre los elegidos, habrá que tomar cartas en el asunto y volver a reunir a las meigas en la Era del Aquelarre…
Cabeza de Baba Yaga en Soportújar
Seguro que sabes de qué lugar estoy hablando: de Soportújar, el pueblo de las brujas al sur de Granada. Un enclave encantado y misterioso del que corren muchas historias… Y es que estamos en un territorio agreste y hostil, refugio de los últimos moriscos de España y donde se alzaron en armas frente al rey Felipe II. La expulsión de los moriscos y la consiguiente repoblación con gentes del norte trajo consigo múltiples leyendas. Hoy, es un paraíso de luz, naturaleza y tranquilidad donde se esconden del mundanal ruido músicos, famosos, budistas, hippies y la gente más variopinta de todas partes del mundo. Pero ¿Cuántos pueblos forman la Alpujarra? 25 municipios, cuya capital es Órgiva, en el valle del río Guadalfeo. Si aún no conoces este enclave al sur de Sierra Nevada, te cuento cuáles son (para mí) los 10 pueblos que no te puedes perder.
Bubión y Capileira, barranco del Poqueira
Contenido del artículo
1. Pampaneira, el pueblo más bonito de la Alpujarra.
Estamos en el barranco del Poqueira, bajo el imponente picacho del Veleta y la cara sur del Mulhacén, la montaña más alta de la península ibérica. Encaramados a las laderas, tres preciosos pueblos blancos como perlas, de arquitectura bereber, se aferran haciendo equilibrismos entre castaños e higueras. El más pintoresco de los tres, y seguramente el pueblo más bonito de la Alpujarra -pertenece a la Asociación de Pueblos más bonitos de España– es Pampaneira. Con estrechas travesías surcadas por acequias de agua, portales de flores y macetas, tinaos (callejón cubierto de vigas de madera) y cuestas, como todos los de la Alpujarra, este puede que sea uno de los más típicos. La verdad, una se enamora de Pampaneira paseando por la Calle Real o el paseo de García Lorca, nuestro gran poeta granadino. Como aliciente extra, comercios locales como la Fábrica de Chocolate y tiendas de artesanías donde se venden las jarapas, alfombras típicas de la comarca. A Pampaneira no le falta un detalle.
Recomendación: si quieres descubrir algunos de los pueblos más bonitos de la Alpujarra granadina, reserva este tour por Lanjarón y el barranco del Poqueira desde Granada:
Pampaneira, los pueblos más bonitos de la Alpujarra granadina
Alojamiento recomendado en Pampaneira: los apartamentos rurales Dreams Alpujarra. Por su ubicación, ideal como base para explorar el Barranco del Poqueira y otros pueblos de la Alpujarra granadina.
2. Soportújar, el pueblo de las brujas.
Dicen que «haberlas haylas» y el dicho se hace realidad en este pequeño municipio de la Alpujarra Alta con apenas 260 habitantes, apodados «los brujos». En la subida al pueblo se ubica la Cueva del Ojo de la Bruja, esa que todo lo ve: un lugar frecuentado por maleantes, a evitar. Una cabeza gigante de Baba Yaga, la temible hechicera eslava, da la bienvenida avisando que este no es un lugar «normal». Su casa, con patas de gallina, se encuentra en un rincón escondido del pueblo, de camino a la Era del Aquelarre. Pero antes, habremos pasado por el mirador del Embrujo, donde las brujas elaboran sus pócimas en un caldero. Pura magia. ¡Imagina pasar un Halloween en Soportújar!
La casita de Baba Yaga en Soportújar
3. Capileira, a la sombra del Veleta.
La «cabellera de las cumbres» -de ahí viene su nombre- se sitúa rozando los 1.500 metros de altitud sobre el nivel del mar. Desde sus bosques de pinos se pueden divisar las costas de África con las montañas del Rif al otro lado del Mediterráneo, envueltas en la bruma. Este pueblo, uno de los más bonitos de la Alpujarra granadina sin duda, además de estar declarado como Conjunto Histórico – Artístico y Paisaje pintoresco, también pertenece a los Pueblos Más Bonitos de España. El trazado sinuoso de sus callejuelas hechizan, llenas de rincones fotogénicos como los lavaderos públicos o la Casa – Museo de Pedro Antonio de Alarcón, el escritor granadino. Su patrona, la Virgen de la Cabeza, custodiada en la iglesia parroquial, fue donada por los mismos Reyes Católicos tras la conquista de Granada en 1492. Capileira no puede faltar en una ruta por la Alpujarra granadina.
Capileira, la Alpujarra granadina
Consejo: echa un vistazo a mis restaurantes favoritos donde comer en la Alpujarra granadina.
4. Lanjarón, el pueblo del agua.
La entrada a la Alpujarra para los viajeros procedentes de Granada es este pequeño pueblo vigilado por una vieja fortaleza musulmana. Una calle larga que huele a buñuelos con chocgolate en invierno y cuyo manantial dicen que es de los más puros del mundo. Por algo sus habitantes se encuentran entre los más longevos de España. Al histórico Balneario de Lanjarón que hoy funciona como hotel – spa solía acudir Lorca con su familia y otras personalidades de principios del siglo XX como Manuel de Falla, Virginia Wolf o Beltrán Rusell. Lo mejor de Lanjarón -además de sus fuentes donde están escritos los versos de Lorca- es hacer una ruta hasta el mágico bosque de Tello o perderse por el barrio del Hondillo, un auténtico laberinto andalusí con rincones llenos de encanto, de hornacinas de santos y recovecos. En este artículo te cuento todo sobre qué ver en Lanjarón, el pueblo del agua.
Rincones de Lanjarón, los pueblos más bonitos de la Alpujarra granadina
5. Pitres, los tinaos más auténticos de la Alpujarra.
Pitres y Capilerilla, abrazados por un bosque de castaños, son uno de los mejores secretos de la Alpujarra. Los turistas pasan de largo, en dirección a Trevélez. ¡No saben lo que se pierden! En Capilerilla las gallinas andan sueltas picoteando de aquí para allá, en la versión Alpujarra de hace un siglo: aquí se rodó «Al sur de Granada». Pitres tiene unos tinaos, patios y chimeneas «con sombrero» tradicionales que son genuinas, siempre rodeadas de gatos tranquilos buscando el sol. Para mí, un dos en uno imprescindibles de la Alpujarra.
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6. Bérchules, el vergel de la Alpujarra.
En el verde barranco donde nace el río Guadalfeo -que riega y da viga a las vegas de frutas subtropicales de Motril y Salobreña– sobre una loma empinada se alza, blanco e impoluto, Bérchules. Estamos en el corazón de la Alpujarra, a mitad de camino entre Granada y Almería. La paz de este bello municipio a 1300 metros de altitud, entre castaños, morales y viñas, solo se ve alterada por la Nochevieja en agosto. Una fiesta inaudita que se celebra desde los años 90, cuando las tormentas y un gran apagón dejo sin fiesta de fin de año a muchos pueblos de la Alpujarra granadina.
Bérchules, los pueblos más bonitos de la Alpujarra granadina
Nota: alojamiento en Bérchules: hay varias casas rurales en el pueblo, como los Apartamentos Rurales El Vergel de Bércules. En temporada alta -fiesta de Nochevieja en agosto- recomiendo reservar con mucha antelación.
7. Yegen, el refugio de Gerald Brenan.
Un recóndito pueblo de la Alpujarra granadina fue el elegido por el escritor británico Gerald Brenan -don Gerardo le decían- para instalarse en 1920. Su refugio de sol y paz tenía cinco palabras: Yegen. Un enclave que fascinó al hispanista por lo salvaje, agreste, peculiar. Durante los catorce años que vivió en él le ocurrieron tantas peripecias que no tuvo más que contarlas en el best seller «Al sur de Granada». Más tarde, recibiría la visita de otros personajes emblemáticos: la pintora Dora Carrington o Virgina Wolf. En pleno siglo XXI, Yegen sigue solitario y taciturno, como esperando la vuelta de aquellos artistas de alma romántica que les conquistó su humilde belleza.
Plaza de Yegen, el pueblo de Gerald Brenan
8. Trevélez, el pueblo más alto de la Alpujarra.
Si buscas un pueblo bonito en la Alpujarra, y famoso, ese es Trevélez, y no solo por su jamón. Se disputa con otros municipios de España el título de «pueblo más alto», en concreto con Vilaflor en la isla de Tenerife o algunos turolenses de la comarca de Gúdar – Javalambre. Polémicas y metros aparte, el encanto de Trevélez es indiscutible. O te conquista por el estómago, tomando una Alhambra con una tapa de jamón en una de sus terrazas; o con su paisaje: la senda que remonta el río Trevélez hasta el arroyo Culo de Perro y Siete Lagunas, bajo la cumbre del Mulhacén es una de las mejores rutas de senderismo en la Alpujarra granadina. Solo para expertos. ¿Un secreto? Si te apetece buen jamón y huyes de las «multitudes», ve al vecino Jubiles.
Iglesia de Jubiles, Alpujarra granadina
9. Pórtugos y la fuente Agria.
Quién no ha echado un trago a esa fuente ferruginosa, bermeja, junto a la ermita de la virgen de las Angustias -la cual por cierto dicen que es remedio infalible contra la infertilidad-. Pórtugos es auténtico, encalado como los demás, con una bonita cascada: el Chorreón.
El Chorrerón, Pórtugos
10. Bubión, el corazón del barranco del Poqueira.
Termino esta lista de los 10 pueblos más bonitos de la Alpujarra donde comencé: en el barranco del Poqueira. Si bien es cierto que, a mi parecer, Bubión no tiene tanto encanto como Capileira o Pampaneira, también merece una visita. Su arquitectura bereber ofrece ejemplos de ese sabor alpujarreño en pasadizos techados, chimeneas con sombrero «para que no se cuelen las brujas», tejados planos e iglesias moriscas. Además, en Bubión está uno de mis restaurantes preferidos de la Alpujarra: el mesón Teide. ¡Quién pudiera comerse ahora un buen plato alpujarreño junto su chimenea!
Tinaos del barranco del Poqueira
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