Quizá hasta ahora no te lo has planteado. Porque no te suena de nada, no sabes qué es lo que hay, ni tienes claro cómo llegar… Incluso hay gente que me ha preguntado «¿Dónde está Georgia?» No es un destino típico ni convencional. Tampoco para todos los viajeros. O sí. Porque en Georgia hay playa -las costas del Mar Negro- arte y cultura en monasterios milenarios, vibrantes ciudades y las montañas más impresionantes y altas de Europa. ¿Necesitas más razones para visitar Georgia? Vamos con un buen puñado.
Si los paisajes escarpados y resplandecientes de nieve del Gran Cáucaso son lo más espectacular que ver en Georgia, los monasterios ortodoxos cubiertos de frescos medievales, su historia y cultura no se quedan atrás. Herederos de un reino legendario cuyo esplendor brilló bajo el gobierno de la reina Tamar, los georgianos se sienten orgullosos de su pasado. Tras una convulsa época tras el desmoronamiento de la Unión Soviética, este país donde nació Stalin, el más terrible dictador de la URSS, mira hacia el futuro y a Europa Occidental. En 2022 solicitó la anexión a la UE.
Iglesia de la Trinidad de Gergueti en Kazbegi
Unos cuantos motivos para visitar Georgia…
Contenido del artículo
1 – Porque es la cuna del vino.
Recientes investigaciones lo han concluido: en Georgia nació el vino. Nada menos que tres mil años antes de la invención de la escritura, en estas tierras del Cáucaso ya existía la viticultura. Las semillas de uvas fósiles cultivadas y los restos de vasijas con vides y prensas que han hallado se remontan a la Edad del Bronce, si no antes. Hace 8000 años Georgia era la principal proveedora de vino en las regiones vecinas de Asia Occidental: Babilonia, Asiria o Ur. De hecho, era con vino como pagaban los tributos al entonces poderoso reino de Asiria. La cultura de Georgia no se entiende sin el vino: en todas las historias y leyendas está presente. Si vas a viajar a Georgia, ¡no dejes de probarlo! Hay diferentes variedades, a mí me encantó el semi dulce tinto. ¡Una delicia!
Restos del lugar para almacenar vasijas de vino en Uplistsikhe, Georgia
2 – Para desgustar la gastronomía del Cáucaso.
Y para acompañar el vino, nada como catar la mejor gastronomía de Georgia. Sabrosa y contundente, el plato estrella es el Kachapuri, ¡aunque tiene muchas variaciones! Un pan en forma de barco relleno de queso de Imeruli y una yema de huevo a medio cocer en el centro es el más típico. También hay que probar los khinkalis, especie de empanadas cocidas rellenas de casi cualquier cosa -queso, setas, carne… – Con una jugosa salsa que se desparrama al morder. El lobio, lobiani, los churchkhela… Son nombres que parecen trabalenguas pero que describen a la perfección la cocina del Cáucaso, donde no faltan los colores atrevidos y algunas especias picantes.
Gastronomía en Georgia
3 – Sus montañas ¡las más altas de Europa!
No, no son los Alpes. La principal razón para visitar Georgia es que es el techo de Europa, con cumbres que superan los 5.000 metros de altura. Tanto por la antigua carretera militar georgiana que lleva hasta Kazbegi, en la frontera rusa, como en la remota región de Mestia, ¡los paisajes del Alto Cáucaso son alucinantes! Pero es que Georgia está completamente rodeada de montañas (excepto en su cara oeste, bañada por el Mar Negro). Al sur se ubica el Caúcaso Menor, frontera natural con Armenia y con nieve permanente casi todo el año. La temporada de esquí en las pistas de Gudari duran muchos meses, haciendo las delicias de los amantes de este deporte.
En verano, las nieves se derriten y hay miles de rutas de senderismo para disfrutar casi en soledad de sus valles y montañas. Sólo los más atrevidos o expertos se animarán a coronar el gran monte Kazbek, un estratovolcán a 5047 metros de altura, en la frontera con Osetia del Norte. El techo de Georgia es el monte Shjara, rasgando el cielo a 5293 metros en la región de Svanetia. Su ubicación: 88 kilómetros al norte de Kutaisi, la segunda ciudad de Georgia.
Kazbegi, Razones para visitar Georgia
4 – Por su cultura e historia.
Un alfabeto propio, una forma de entender la vida, música y danzas con carácter propio… El fuerte sentimiento de identidad georgiana está forjado a base de una historia antigua, la de varios reinos en medio del Cáucaso que se unieron entre en el siglo IX. Georgia fue uno de los primeros territorios en abrazar la fe cristiana: en el año 327 el rey Mirian III de Iberia y su esposa fueron bautizados por Santa Ninò, una mujer que recorrió el país predicando el evangelio desde la región de la Capadocia. Desde el siglo X al XIX reinaron en estas tierras la dinastía de los Bagrationi, quienes presumían de ser descendientes del legendario rey David de Israel. A ella perteneció la reina Tamar, la primer mujer que gobernó Georgia en el siglo XII, expandiendo el imperio y dando décadas de prosperidad. También bajo su mandato se construyó Vardzia, ciudad – cueva excavada en la roca con más de 2000 estancias. ¡Impresionante!
Ciudad – cueva de Vardzia en Georgia
5 – Sus iglesias y monasterios.
El primitivo cristianismo y la influencia del vecino imperio Bizantino ha quedado reflejada en templos magníficos, algunos de ellos Patrimonio de la Humanidad. El monasterio de Gelati en las inmediaciones de Kutaisi, fue erigido por el rey David IV de Georgia en el siglo XII, conservando unos frescos medievales con excepcional calidad. Este centro monástico fue el principal núcleo de misticismo y erudición del Cáucaso en la Edad Media. Muy cerca de Tbilisi encontramos Mtskheta, una de las ciudades más antiguas de Georgia, donde se conserva la Catedral de Svetitsjoveli y el cercano Monasterio de Jvari, coronando la colina. Lugares Patrimonio de la Humanidad y principales puntos de peregrinaje del país, vinculados a Santa Ninò, la mujer que evangelizó Georgia.
Pero si hay un templo mítico y espectacular, tal vez la fotografía más reconocida del país, esa es la iglesia de la Trinidad de Guergueti, a escasos kilómetros de la frontera rusa. ¡Sólo por su patrominio ya merece la pena visitar Georgia!
Iglesia de la Trinidad de Gergueti, Georgia
6 – Por sus ciudades.
Otra de las razones para visitar Georgia es conocer sus dinámicas ciudades. Tbilisi, la capital georgiana es una urbe llena de contrastes que sorprende continuamente. Puedes encontrar en ella reminiscencias turcas -con sus puestos callejeros de zumo de naranja y granada- y auténticos shawarma… Baños de azufre en el barrio oriental. En Old Tbilisi hay casas con estructura tradicional de madera y tiendas muy cucas… Por calles que conducen a la vieja fortaleza. Escenas que contrastan con los modernos edificios de cristal recién construidos como el puente del Milenio… Otras ciudades de Georgia también combinan este eclecticismo del «feísmo» de los edificios soviéticos, lo arcaico y lo moderno. Desde Kutaisi a Gori, la ciudad de Stalin, Georgia ofrece un continuo choque de sensaciones.
Tbilisi, capital de Georgia
7 – ¡Y por sus pueblos!
¿Sabías que el pueblo habitado más alto de Europa está en Georgia? Su nombre: Ushguli, en la remota región de Mestia, Gran Cáucaso. A 2.200 metros de altura, a los pies del citado anteriormente monte Shjara -cumbre más alta de Georgia- unas 70 familias viven en un entorno que deja sin habla de lo alucinante… En realidad Usghguli lo componen cinco localidades: Zhibiani, Chubiani, Chajashi, Murqmeli y Lamjurishi Para llegar a Ushguli hay que hacerlo en vehículo 4×4 o en un trekking de cuatro días desde Mestia, la capital de la región -sólo es posible en verano-. ¿Te animas?
Ushguli, el pueblo más alto de Europa está en Georgia. Fuente: Pixabay
8 – La hospitalidad de sus habitantes.
Es bien conocida la hospitalidad de los habitantes del Cáucaso, aunque muchos de ellos (especialmente la gente mayor) no habla inglés, están más que dispuestos a abrirte sus puertas y compartir historias. Sobre todo en los pueblos remotos de las montañas.
9 – Porque es muy económico
En Georgia la moneda es el LARI. El cambio nos favorece: 1€ son unos 2,77 laris, siendo muy barato viajar por el país. Tanto el transporte público, la comida, los alojamientos… ¿Un ejemplo? Hotel con habitación doble y baño privado, con un gran desayuno incluido, cuestan una media de 20 – 30€ la noche; los hay mucho más baratos dependiendo de la zona y las comodidades. Comer o cenar en un restaurante con varios platos, vino o cerveza, postre y café… Unos 15€ con persona. Y siempre hay opciones de comida rápida mucho más económica.
¡No viajes a Georgia sin seguro!
Aunque en general es seguro viajar a Georgia, este país aún no pertenece a la UE. Por lo que no estamos cubiertos por las prestaciones de la Seguridad Social como en España. En caso de necesitar una consulta médica, tendremos que pagar por adelantado si no tenemos seguro: siempre hay que llevarlo. Por lo que pueda pasar, en caso de accidente, hospitalización… Yo recomiendo MONDO seguros. ¡La compañía con la que siempre voy asegurada! Nada más adquirirlo, te recomiendo descargar la app móvil: ahí tendrás el teléfono directo donde llamar en caso de urgencia y un chat médico disponible las 24 horas para cualquier consulta en español. Si lo compras a través de mi web tienes un 5% de descuento. Lo puedes conseguir pinchado aquí:
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