La khaleesi avanza a lomos de la Plata liderando su ejército de fieles dothrakis, por un desértico paraje al otro lado del Mar Angosto. ¿Recuerdas esta mítica escena de «Juego de Tronos»? Podría ser Arizona, Nevada o Wadi Rum… Pero este dramático paisaje se encuentra en España. No es otro que las Bardenas Reales en Navarra. Un parque natural con una gran riqueza geológica y biológica, de nada menos que 42.500 hectáreas de extensión, declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO. Hoy te cuento cómo visitar las Bárdenas Reales por libre ¡un escenario de cine inolvidable!
El lejano Oeste o las Bardenas Reales
La belleza de las Bardenas Reales es indiscutible, ¡imprescindible en una ruta por Navarra en coche! Acantilados, fósiles, montañas con formas tan peculiares como el Castildetierra y la Pisquerra… Configuran un singular territorio, árido y sobrecogedor. Un espacio atravesado por vías trashumantes, usadas desde hace siglos, por pastores que bajan de las montañas al llegar el invierno ¡parece mentira que estemos tan cerca del Pirineo! Las Bardenas Reales se ubican a sólo una hora en coche de Pamplona, la capital navarra.
El mejor punto de partida para hacer una ruta por las Bardenas Reales es Tudela: la ciudad de las Tres Culturas está a las puertas del parque natural. A sólo 25 kilómetros.
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Guía para visitar las Bardenas Reales, el desierto de Navarra
A la hora de visitar las Bardenas Reales es muy importante tener en cuenta que se trata de un espacio natural protegido, altamente frágil. Hay que seguir las indicaciones de los carteles, no salirse de los senderos establecidos ni pisar por donde no se debe: estamos en un área ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves). Hay nidos y madrigueras, por lo que al saltarnos las prohibiciones podemos cometer un delito ecológico. Nada de dejar residuos o recoletar plantas o piedras. Por favor, seamos siempre respetuosos con el medio ambiente y turistas responsables.
Señales de limitación en las Bardenas Reales
¿Cuál es la mejor época para visitar las Bardenas Reales? Sin duda las estaciones intermedias: el otoño y la primavera. El invierno es duro y ventoso -aunque si ha nevado el frío puede compensar con creces la estampa mágica e inusual que encontraremos-. Por el contrario, durante el verano hace demasiado calor. Al ser un terreno semidesértico y sin una sombra, la experiencia no será la mejor, exponiéndonos a la insolación. Hay que llevar calzado cómodo, sombrero y agua. ¡No olvides la cámara de fotos! Las Bardenas Reales son de los lugares más espectaculares que ver en Navarra.
Alojamiento en las Bardenas Reales.
Un alojamiento rural con mucho encanto al pie del parque natural son las Cuevas de Valtierra. ¡Ideal para visitar las Bardenas Reales en familia! Por su ubicación, suelen tener mucha demanda, así que te recomiendo reservar con mucha antelación especialmente en temporada alta como puentes o Semana Santa. Si lo que buscas es un hotel romántico bajo un millón de estrellas, gracias a la ausencia de contaminación lumínica, el Hotel Aire de Bardenas es un acierto seguro. ¡Qué magia la de despertar aquí!
Qué son las Bardenas Reales.
Las Bardenas Reales son un paraje semidesértico al sur de la comunidad Navarra, en plena Depresión del Ebro. Impresionantes formaciones rocosas, barrancos y planicies fruto de la erosión del viento y los cambios bruscos de temperatura son su seña de identidad. Hace miles de años fue un mar interior, paraíso de fauna más propia del continente africano. Tortugas gigantes o cocodrilos campaban a sus anchas, quedando sus huellas impresas en la roca.
Hoy las Bardenas Reales es el hogar de grandes rapaces y esteparias -águilas y buitres- aves nocturnas como búhos y lechizas. La mítica avutarda, además de zorros, ginetas o gatos monteses. La belleza desolada de sus páramos y mesetas se lee como un libro abierto de la Tierra donde se pueden apreciar sus pliegues y materiales: rayas de colores con estratos de minerales, arcillas y arenas. El nombre de Bardenas Reales proviene del medievo, cuando era un coto de caza privado de los reyes navarros.
Chimeneas de las Hadas, qué visitar en las Bardenas Reales
Es posible disfrutar de este paisaje haciendo rutas de senderismo por las Bardenas Reales, ciclismo o en vehículo 4×4 y hasta en un turismo normal. ¡Te cuento cómo!
¿Visita por libre o hacer un tour por las Bardenas Reales?
Es posible visitar las Bardenas Reales por libre, con vehículo propio. Sólo hay que tener en cuenta la normativa del parque y ajustarse a sus horarios. No es estrictamente necesario contar con un vehículo todo terreno para circular por la carretera principal del parque, de tierra. Eso sí, ten en cuenta que el límite de velocidad es de 40 km por hora. En cuanto al horario del parque: la entrada es a partir de las 8.oo y la salida, una hora antes del atardecer.
Otra opción es hacer un tour guiado por las Bardenas Reales, ideal para adentrarse por sus rincones más icónicos de la mano de las explicaciones de un experto local. El punto de encuentro de la excursión es el parking de Sendaviva y la duración de la experiencia, 2 horas aproximadamente.
Colores de la Bardena Blanca
Lugares que ver en las Bardenas Reales.
Este extenso parque natural está dividido en tres grandes espacios: las Bardenas Blancas, las Bardenas Negras y el Plano. Las más famosas y conocidas por los turistas, donde se encuentran las formaciones conocidas como chimeneas de hadas son las Bardenas Blancas, donde la tierra es de color claro -de ahí el nombre-. El Plano es una gran llanura y está compuesto de terrazas fluviales. En cuanto a la Bardena Negra, con tonos más rojizos, es la menos desértica gracias a un bosque de pinos.
Centro de Información de las Bardenas Reales.
Previo a comenzar tu ruta por las Bardenas Reales, te recomiendo visitar el Centro de Información. Situado en la Finca de los Aguilares, aquí podrás coger mapas de la zona y ver una pequeña exposición arqueológica. Te ayudará a situarte sobre el terreno, antes de sumergirte en él. El acceso típico a las Bardenas Reales se hace por Arguedas (en la N-134). Una pista de tierra conduce al corazón de la Bardena Blanca, con sus icónicas formaciones. La ruta en coche dura unas 2 horas aproximadamente, saliendo por la zona norte de las Bardenas. Aunque el tiempo es relativo: depende de las fotos y vídeos que tomes del lugar -yo tardé bastante más en visitar las Bardenas Reales, obviamente-.
Carretera de tierra en las Bardenas Reales
Mirador de las Bardenas Blancas.
Ubicado muy cerca del centro de visitantes, el mirador de la Bardena Blanca ofrece unas espléndidas vistas a las Bardenas Reales, con paneles explicativos sobre su formación geológica, la fauna y flora presente en el parque natural.
Cabezo de Castildetierra.
El Castildetierra es la imagen más famosa que ver en las Bardenas Reales. Su forma de torre rocosa o pináculo con «sombrero» es la típica de las chimeneas de las hadas y no es más que fruto de la erosión. Frágil y sujeta a las inclemencias de la intemperie, se cree que tardará poco en derrumbarse. Estas agujas caprichosas se pueden encontrar en otras zonas desérticas del mundo como el mítico Parque Nacional del Cañón Bryce en Utah (EEUU) o la Capadocia turca. A los pies del Castildetierra se ubica el barranco Grande o barranco de las Cortinas, surcado por un arroyo intermitente, dependiendo de las lluvias.
Castildetierra, visitar las Bardenas Reales en Navarra
Cabezo de las Cortinillas.
¡Vistazas desde lo alto! El Cabezo de las Cortinillas es el único al que está permitido la subida -hay unas escaleras- ya que el resto de los cabezos tienen riesgo de derrumbe, como sucede con el Castildetierra. A nuestros pies, una de las pintorescas chimeneas de las hadas, tan fotogénicas. Además, está muy cerca del anterior.
Cabezo de las Cortinillas
Mirador de Juan Obispo.
Uno de las mejores vistas de la inmesidad del desierto de las Bardenas Reales se obtiene caminando hasta el mirador de Juan Obispo -no es una subida muy exigente-. A los pies hay unas pequeñas charcas o estanques de agua que recogen las aguas de lluvia y dan de beber a toda esa fauna salvaje que habita las Bardenas Reales.
El Mirador de Juan Obispo
Cabaña y Cabezo de Pisquerra.
A los pies del gran Cabezo de Pisquerra se encuentra una de las cabañas de piedra que usaban antaño los agricultores o los pastores para refugiarse. También los cazadores, antes de que esta zona fuera declarada parque natural y Reserva de la Biosfera. Cuidado porque a este cabezo no está permitido subir por la fragilidad del ecosistema, pero sí podemos disfrutar de su imponente silueta desde abajo. Es una pena, pero las cabañas de las Bardenas Reales en su mayoría están en estado ruinoso, abandonadas.
Cabañas en las Bardenas Reales
Los Tres Hermanos.
Muy cerca del campo de tiro y cuartel militar ubicado en esta zona -donde los carteles indican claramente cuál es el límite- se ubican tres cabezos en una misma base, donde se aprecian los difentes estratos de la tierra como pintados a brochazos.
El Monumento al Pastor (El Paso).
Al norte de las Bardenas encontramos el Monumento a Pastor bardenero, en un lugar conocido como El Paso. Y es que por aquí pasa la Cañada Real de los Roncaleses, vía trashumante por donde bajan los pastores (cada vez menos) con sus rebaños desde el valle de Roncal en el Pirineo navarro a la Ribera del Ebro en invierno. Cada septiembre, al finalizar el verano, se celebra la fiesta de la Trashumancia.
Rutas de senderismo y BTT por las Bardenas Reales.
Existe toda una red de itinerarios marcados para disfrutar de las Bardenas Reales tanto a pie como en bici de montaña. En total son nueve rutas por las Bardenas Reales en bicicleta y tres de senderismo.
- Senderismo: la Ruta del Fraile, la del barranco de las Cortinas y las Cortinillas (cerradas actualmente).
- Rutas BTT por las Bardenas Reales: la Gran Bardena, el Plano o la vuelta al Polígono de Tiro son de los itinerarios en bici más populares que hacer en las Bardenas Reales. Lo mejor es descargar la App Bardenas Reales, donde viene toda la información.
Castildetierra, cómo visitar las Bardenas Reales en Navarra
¿Te animas a conocer el asombroso desierto de Navarra?
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