Itinerario por la Polonia más desconocida: qué ver en la región de Lublin
El sol de finales de verano inunda sin piedad mi apartamento situado en el complejo de la centenaria fábrica de cerveza Perla, la más famosa de la ciudad de Lublin. La simpática encargada me ha dejado dos regalos para desayunar: un bollo típico de cebolla y semillas de amapola –cebularz– y un brioche dulce, relleno de arándanos con nombre impronunciable: jagodzianki. Café y estómago lleno, ya estoy lista para descubrir qué ver en Lublin y sus alrededores. Con «L» y sin acento en la «i», la urbe más poblada del este de Polonia no es la más popular del país. Sin embargo, posee un castillo medieval, un pintoresco centro histórico y es la base perfecta para explorar una región con maravillosas sorpresas para el visitante: Naleczów, Kazimierz Dolny o Zamość, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. ¿Empezamos?
Iglesia católica, Museo del pueblo de Lublin
Ruta por el este de Polonia: región de Lublin.
A 90 minutos de
Varsovia, la capital polaca, en un breve trayecto en coche o tren llegamos a Lublin. De carácter joven y entusiasta, con 339 mil habitantes,
Lublin es la novena ciudad más grande de Polonia y una de las principales
urbes universitarias del país. Ubicada a orillas del río Vístula y en un enclave estratégico entre Lituania y Cracovia, la capital histórica del reino de Polonia, Lublin se desarrolló en el medievo gracias al comercio. He aquí la clave de su importancia como punto de encuentro y
lugar de fusión de culturas, conexión entre Occidente y Oriente. El ejemplo más relevante de esta simbiosis se localiza en el interior del castillo de Lublin:
la capilla de la Santísima Trinidad. Un templo único donde el
estilo gótico y el bizantino se dan la mano. Pero vamos por partes…
Calles del centro de Lublin, Polonia
Un viaje por la Polonia más desconocida…
Mi propuesta para este viaje por sitios menos «típicos» de Polonia es un itinerario de 5 días o una semana por el este de Polonia, saliendo desde Varsovia y terminando en la bella Cracovia. Otra urbe cuya ciudad vieja es Patrimonio de la Humanidad y personalmente, creo que es una de las más bonitas de Europa. Toma nota:
- Día 1: llegada a Varsovia.
- Días 2 y 3: traslado a Lublin (la forma más rápida es en coche de alquiler pero también hay tren y bus). Principales sitios que ver en Lublin ciudad: centro histórico, castillo, fábrica de cerveza Perla, museo al aire libre del pueblo de Lublin, visita al campo de concentración de Majdanek. Alojamiento recomendado: Perła Brewery Apartments.
- Día 4: villa termal de Naleczów y el precioso pueblo de Kazimierz Dolny. Se puede hacer noche en alguno de los hoteles del pueblo o regresar a Lublin, ya que sólo está a 60 kilómetros.
- 5: Zamość, ciudad Patrimonio de la Humanidad.
- Días 6 y 7: visitar Cracovia en 2 días (o más). Alojamiento recomendado en Cracovia: INX Design Hotel, en la calle principal del barrio de Kazimierz. ¡El distrito de moda!
Sitios que ver en Lublin, Polonia
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Lublin en dos días, la «ciudad de las cabras».
Cuenta la leyenda que hace siglos, cuando los suecos invadieron Polonia, los habitantes de Lublin huyeron a un escondite seguro, pudiendo llevar sólo a una cabra con ellos. Durante esos duros días y hasta que pudieron volver a sus casas esta cabra les alimentó dándoles leche, logrando sobrevivir gracias al animal. La cabra se convirtió en el símbolo de la ciudad y está representada en las fachadas, el escudo y en algunos rincones de la ciudad. ¡Búscalas!
Las cabras de Lublin
El castillo de Lublin.
Qué mejor lugar para comenzar la visita a Lublin: dominando la ciudad desde lo alto de la colina, es el monumento más importante que ver en Lublin. De la fortaleza medieval construida por Casimiro II «el Justo», en el siglo XIII -es una de las residencias reales más antiguas de Polonia- sólo queda la torre. Hoy, las paredes desnudas de su interior son salas con documentos históricos, testigo del horror que vivió en las últimas épocas, mucho después que los reyes de Polonia perdieran su corona. Y es que el castillo de Lublin se usó como prisión tanto en la época zarista como durante la ocupación nazi: se calcula que albergó entre 40 y 80 mil presos de la resistencia polaca. También judíos, antes de ser trasladados al cercano campo de concentración de Majdanek.
Torre del castillo de Lublin
Capilla de la Santísima Trinidad.
Los muros del castillo guardan una reliquia artística: la espectacular Capilla de la Santísima Trinidad. Pequeña iglesia que se construyó como capilla palatina en la época de Casimiro «el Grande», siglo XIV. Los frescos que adornan sus muros fueron un encargo del rey Vladislao II al maestro Andrej en 1418. Bajo el Pantocrátor que preside la bóveda, los murales son una exquisita obra gótica – bizantina. Aquí tenemos la fusión Oriente – Occidente de la que presume Lublin con razón.
Capilla de la Santísima Trinidad, castillo de Lublin
El museo de Lublin.
Un paseo por el resto del castillo significa recorrer salas y salones que hoy sirven de sede principal del Museo Nacional de Lublin. Arte antiguo, contemporáneo, objetos arqueológicos o una exposición de la divina Tamara de Lempicka, la reina del Art Decó e icono del feminismo. Toda una mañana no basta para empaparse de la historia y la cultura que acoge el castillo. Incluyendo la mesa del Tribunal de la Corona, donde según la leyenda quedó impresa la mano del Diablo tras un juicio injusto.
Exposición de Tamara Lempicka
Centro histórico de Lublin.
La calle Zamkowa conduce directa desde la colina del castillo al centro histórico de la ciudad, pasando sobre lo que antaño estuvo el gueto judío. El Centro de Encuentro de Culturas recoge memorias de los antiguos moradores de la ciudad, testimonios de otra época en forma de audios y fotografías. Pequeño pero encantador, así es el centro histórico de Lublin.
Puerta de Cracovia, qué ver en Lublin, Polonia
Las callejuelas empedradas se suceden con pasajes, arcos, casas nobles, coquetas cafeterías con jardines secretos y galerías de arte. Incluso en una travesía se conserva la «piedra del infortunio» o piedra de la Ejecución, donde el verdugo cortaba la cabeza en las ejecuciones públicas. Dicen que la piedra está maldita desde que se ajustició sobre ella a un hombre inocente y que tocarla trae muy mala suerte… ¡Muy tétrico!
La piedra del infortunio, qué ver en Lublin, Polonia
La catedral de San Juan Bautista es el templo principal que ver en Lublin: construida entre 1592 y 1617, es una de las primeras iglesias barrocas en Polonia. El interior es un despliegue de murales bíblicos a los que acompaña la música de un órgano en cada liturgia.
Interior de la catedral de Lublin
El «Ojo Mágico».
Por la puerta de Cracovia se sale a la ciudad nueva, con avenidas rectas de tiendas y modernos restaurantes. El lugar más ajetreado, por donde circulan más transeúntes, es la plaza Litewski: una fuente multimedia, las letras de Lublin donde posan todos los turistas, el monumento de la unión de la ciudad y una fantasía. El «Ojo Mágico» es un portal audiovisual a otro lugar. Una innovadora iniciativa para unir Lublin con Vilna, capital de Lituania, a través de una pantalla que proyecta imágenes a tiempo real de las dos ciudades. ¡Nunca vi nada igual!
El Portal y Ojo Mágico de Lublin
Museo del pueblo de Lublin.
Otra visita que hacer en Lublin muy interesante es al extenso museo Skansen, también conocido como Lublin Open Air Village Museum. Un extenso espacio verde y arbolado, donde se recrea la vida tradicional rural de la región de Lublin. Granjas centenarias con sus herramientas, establos y muebles… Molinos, la casa del gobernador o del párroco e incluso dos iglesias -una católica y otra ortodoxa- que a día de hoy siguen dando oficios. Lo más interesante de esta villa polaca es que se trata de construcciones «reales», que han sido trasladadas desde sus lugares de origen para construir el museo; no son atrezzo ni decorado. Imprescindible.
Iglesia ortodoxa en el Museo del pueblo de Lublin
Visita a la cervecería Perla.
Menudo santuario para los amantes cerveceros las instalaciones del museo subterráneo de la cervecería Perla. ¡Una fábrica de cerveza con casi 200 años de historia! Bajo un antiguo monasterio y su iglesia se extiende un laberinto bajo tierra, sede de la popular cerveza producida en Lublin: Perla. La más consumida en la región. Por supuesto, la visita a la fábrica incluye degustación de varios tipos de cerveza.
Cervecería Perla, Lublin
La cervecería Perla tiene una amplia terraza y restaurante, donde sirven platos tradicionales de Lublin. Otro de mis favoritos es el 2 Pi er, con menú del día y fabulosas vistas. De la gastronomía polaca y todos los platos típicos merece artículo aparte ¡porque tiene chicha!
Campo de concentración de Majdanek.
La visita más dura que hacer en Lublin, pero necesaria para ser conscientes, para no olvidar la historia. Aunque aviso que deja un malestar y una sensación bastante horrible…
A 4 km del centro de la ciudad se ubica este estremecedor lugar, construido durante la ocupación nazi en la Segunda Guerra Mundial. Su localización, muy cerca de la frontera rusa, hizo que al ejército alemán no le diera tiempo a destruirlo durante la retirada de las tropas ante el avance del Ejército Rojo. Es por ello que Majdanek se conserva tal y como era. Creado en 1941 por orden del comandante de las SS Heinrich Himmler, en principio albergó prisioneros polacos de la resistencia. Con el desarrollo de la guerra llegaron de todo tipo de nacionalidades, incluyendo republicanos españoles y judíos del gueto de Lublin y otras ciudades polacas. Cuando los rusos liberaron Majdanek, en julio de 1944, invitaron a la prensa internacional a ser testigos y retratar el horror allí vivido, incluyendo los hornos crematorios y cámaras de gas. Hoy este memorial se conserva como recuerdo de lo que nunca debió de suceder…
Campo de concentración de Majdanek, qué ver en Lublin ciudad
La Villa termal de Naleczów.
Hora de salir de Lublin y adentrarnos por su región de colinas suaves, campos de lúpulo y bosques de ribera. A 30 kilómetros se encuentra Naleczów, villa histórica con aguas termales. Además de las tradicionales casas de madera, hay varios balnearios y spas donde turistas locales se trasladan para descansar y recibir diversos tratamientos. ¿Una forma diferente de explorar esta pequeña urbe? Con una visita panorámica en un coche vintage: los hace la empresa Retro Melex.
Naleczów, ruta en coche vintage
Para amantes del senderismo, en Naleczów se accede al barranco de Loess. Uno de los paisajes más curiosos y pintorescos de la región de Lublin. Se trata de un bosque donde dicen que el aire es extremadamente puro, por lo que a los que padecen de afecciones pulmonares o están empachados de la vida tóxica en la gran ciudad, recomiendan dar paseos para recargarse de buena salud y energía. ¿Por qué no?
Barranco de Loess, qué hacer en Lublin región
El encanto de Kazimierz Dolny.
Otro de los pueblos imprescindibles que ver en Lublin región es una villa de artistas y bohemios con gran fama a nivel local: Kazimierz Dolny. Rodeada de verde, destacan las ruinas del castillo y la iglesia de San Juan Bautista con su tejado rojo. Fundada en el siglo XII por el rey Casimiro el Justo -de donde toma su nombre- junto a sus casas señoriales Kazimierz Dolny conserva los antiguos graneros. Con un estatus de ciudad -aunque sólo tiene 3.500 habitantes- esta localidad a orillas del gran Vístula es uno de los lugares más encantadores que ver en Polonia.
Río Vístula y graneros en Kazimierz Dolny
Su aire bucólico y pacífico, detenida en el tiempo, ha hecho de ella destino de artistas y pintores en busca de inmortalizar su paisaje. Como colofón final: en las bodegas Winnica Las Stocki, a 16 kilómetros de la villa, se puede disfrutar de una cata de vino ecológico de la región. Los dueños son un encanto.
Kazimierz Dolny, qué ver en Lublin región, Polonia
Un paseo por Zamosc.
¡Qué maravilla! Última parada en esta ruta por la PoloniaDesconocida y la región de Lublin. Aterrizamos en Zamosc, una preciosa ciudad renacentista amurallada, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Fundada en 1580 por la noble familia de los Zamoyski, su trazado fue diseñado por el arquitecto italiano Bernardo Morando según los cánones de la ciudad ideal del Renacimiento: una urbe pensada para el bienestar físico y social de las personas que viven en ella. Hoy, su estructura arquitectónica se conserva prácticamente intacta, con templos clásicos o pintorescas casas burguesas. Sin embargo el castillo donde vivieron los señores de la ciudad, no es visitable. Durante la ocupación rusa se expropió y convirtió en una escuela pública, que sigue actualmente.
Zamosc, una ciudad Patrimonio de la Humanidad en Polonia
Dando un paseo por el centro histórico de Zamosc podemos admirar el armonioso edificio del Ayuntamiento, los templos religiosos en estilo clásico y las típicas casas burguesas, con áticos en la parte superior. Atención a las más bonitas de la plaza del Mercado: pertenecieron a ricos comerciantes armenios. Aunque en Zamosc, enclavada en un estratégico enclave en la ruta comercial entre el Mar Negro y el noroeste de Europa, se establecieron diferentes nacionalidades y etnias: polacos, italianos, griegos, alemanes, judíos sefardíes y armenios. Siempre bajo aprobación de los Zamoyski, quienes no permitían que «cualquiera» pudiera vivir en su ciudad ideal.
Ayuntamiento de Zamosc
Casas burguesas en la plaza del Mercado de Zamosc
¿Qué no perderse en Zamosc?
El trompetista, que toca a las 12 todos los días desde la torre del Ayuntamiento en dirección a todos los puntos cardinales excepto el sur, donde se ubica Cracovia: según la leyenda, el dueño de la ciudad le tenía tirria por su fama y belleza. En la esquina opuesta, hay una farmacia aún en uso que siempre ha estado abierta desde su apertura, en 1609.
La catedral de Santo Tomás es una joya renacentista de estilo italiano, con ocho capillas -en una de ellas descansan los Zamoyski, linaje fundador de la ciudad. Aunque Zamosc también conserva su gran sinagoga, hoy museo con una exposición de Rosa Luxemburgo -de ascendencia judía y nacida en Zamosc-. La sinagoga logró salvarse de la destrucción nazi porque fue usada durante la guerra como cuartel general.
Capilla de los fundadores de Zamosc
Comer en Zamosc:
Para reponer fuerzas: mi recomendación es el restaurante Arte, pegado al Ayuntamiento, donde degustar platos de la región. Uno de los postres que es obligatorio probar es el pastel armenio, en homenaje a aquellos comerciantes que se establecieron en la ciudad, delicia a base de capas de hojaldre, crema pastelera y nueces. ¡Buen apetito!
Pastel armenio, café Arte en Zamosc
Sigue viajando por el blog…
¿Con más tiempo para recorrer Polonia? En tren (con cambio en Varsovia) podemos llegar a
Gdansk, la ciudad del ámbar. Al norte del país se ubica una de las joyas del
mar Báltico. ¡Absolutamente encantadora! Y es que Polonia es mucho más que Varsovia o Cracovia
¡un destino para repetir!
Gdansk, la ciudad más bonita de Polonia
Agradecimientos: gracias a la oficina de Turismo de Lublin por la invitación a conocer esta ciudad y región del este de Polonia. Todo lo que he escrito sobre qué ver en Lublin y alrededores está basado en mi propia percepción y experiencia.
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