Pontevedra bajo la lluvia: un paseo por la ciudad de piedra

Mis recuerdos de Pontevedra aparecen empañados por la lluvia de abril. Llegué a esta capital gallega a pie, con mochila y los pies cansados tras completar 20 kilómetros desde Redondela: era mi tercera jornada en el Camino Portugués a Santiago de Compostela. Peregrina fatigada pero contenta, tras almorzar y una merecida ducha en el alojamiento me dispuse a conocer qué ver en Pontevedra. A pesar de la lluvia intermitente me soprendió para bien: me dejó con ganas de más y es que una tarde no basta -ni de lejos- para recorrer todos sus encantos. Pero al menos sí hacerse una idea de su monumental centro histórico, el ambiente acogedor de plazas y tabernas. ¿Te cuento cuáles son los lugares que no te puedes perder?

Centro histórico de Pontevedra

Ciudad tallada en piedra. Hospitalaria y repleta de personajes entrañables -entre ellos el señor Valle Inclán convertido en piedra– Pontevedra me resultó muy apacible. Especialmente por su extenso casco histórico peatonal, por el que las personas pueden transitar sin malos humos ni el ruido de coches. Cómo se agradece.

Alojamiento recomendado en Pontevedra.

Me hospedé en pleno centro, en el Hotel Boa Vila. Ubicado en el mismo Camino de Santiago a su paso por la ciudad. La situación es perfecta: a unos pocos pasos hay multitud de bares y restaurantes para comer / cenar.

La plaza de la Peregrina.

El icono más importantes del Camino Portugués a Santiago es el Santuario de la Peregrina, en el corazón de Pontevedra. En la plaza del mismo nombre se alza un templo construido a finales del siglo XVIII, mezcla de barroco tardío con estilo neoclásico. Con planta de concha de vieira, en su interior alberga la imagen de la virgen peregrina, patrona de la provincia de Pontevedra y del Camino Portugués. Cuentan que la pila para el agua bendita realizada con la cocha de un molusco fue traída del Pacífico por el mismo contraalmirante Méndez Núñez, tras dar la vuelta al mundo a bordo de la buque Numancia.

Santuario de la virgen Peregrina, Pontevedra

Curiosidades y tradiciones de Pontevedra: en carnaval es posible vivir el entierro del Loro. Una recreación del velatorio y cortejo fúnebre que organizó el boticario Perfecto Feijoo cuando murió su querido loro Ravachol un lunes de carnaval de 1913.

Convento de San Francisco.

Otro de los monumentos históricos que ver en Pontevedra es esta iglesia conventual también ligada al Camino Portugués: dicen que San Francisco de Asís fundó el convento a su parada en Pontevedra mientras hacía la ruta jacobea para rendir pleitesía al Apóstol en Santiago de Compostela. Los ricos terratenientes de Soutomaior cedieron una parcela de sus dominios para la construcción del convento que se alzó entre 1310 y 1360, en lo que por entonces era la ciudad extramuros. La vetusta iglesia gótica alberga las sepulturas de varias familias nobles de la época y un emblemático trovador y marinero: Paio Gómez Charino.

San Francisco, qué ver en Pontevedra en un día

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Plaza de la Herrería.

Sigo admirando el centro histórico de Pontevedra con mis pies quietos en una de las plazas más populares de la ciudad, con bares y cafeterías. Su nombre proviene por los negocios que ocupaban antaño los soportales: los ferreiros o herreros, que con sus forjas proporcionaban metal a los gremios de la ciudad durante el medievo. A unos pasos se puede contemplar la fuente da Ferrería, siendo lugar de paso entre locales y peregrinos que transitan entre los imponentes edificios del convento de San Francisco y el santuario de la virgen peregrina.

Plaza de la Ferrería, sitios que ver en Pontevedra en un día

Basílica de Santa María la Mayor.

Camino ahora hasta un Real Santuario y monumento histórico artístico: esta basílica del siglo XVI -que no catedral ya que la sede del obispado está en Santiago de Compostela- fue promovida por nobles de la villa y los gremios, entre ellos la cofradía do Corpo Santo, gremio de mar más antiguo de toda España. No hay que perderse su maravillosa fachada principal, de estilo plateresco, obra de Juan Noble y el maestro Cornielis de Holanda. Repleta de detalles, en ella se representan personajes bíblicos y vieiras esculpidas. También los conquistadores de las Américas tienen su hueco en Santa María: Cristóbal Colón y Hernán Cortés aparecen a ambos lados del rosetón.

Basílica de Santa María la Mayor, Pontevedra. Fuente: Turismo de Galicia.

A esta misma basílica acudía a escuchar misa don Ramón, más conocido como Valle – Inclán: a tan solo unos pasos se ubica la que fue su casa en la adolescencia. El ilustre novelista, periodista y dramaturgo modernista nació en Villanueva de Arosa, al borde de la ría, mudándose a Pontevedra para estudiar el bachiller. Su antigua vivienda, donde se inició como escritor con su primer libro: la colección de relatos «Femeninas», se encuentra en la plaza de las Cinco Calles.

Ramón del Valle – Inclán, Pontevedra

Plaza de la Leña.

La plaza más pintoresca (y fotogénica) que ver en Pontevedra. Con casitas de piedra de verdes postigos, animados bares de tapas y restaurantes gallegos donde probar las delicias más típicas como las zamburiñas o el pulpo a feira se concentran en torno a un cruceiro del siglo XVI.

Convento de Santo Domingo.

Siguiendo el trazado que marca el Camino Portugués a su paso por Pontevedra, hay que prestar atención a unas ruinas de aspecto romántico (aunque de época gótica): las del antiguo convento de Santo Domingo. Construido por los dominicos en la época medieval, tras su deterioro con el paso de los siglos fue abandonado sin que los esfuerzos por restaurarlo en el siglo XVIII tuvieran éxito.

Plaza de la Pedreira.

A las afueras de la ciudad amurallada, en una gran explanada conocida como la eira da Herba, los canteros trabajaban la piedra. Desde aquel entonces este espacio conserva su nombre, A Pedreira, a pesar de que Pontevedra se expandió e integró la antigua era como parte de la villa. De época posterior es su segundo nombre: praza de Mugartegui, gracias al lujoso pazo que se construyó en el siglo XVIII. Este palacio gallego, con escudo nobiliario esculpido en la fachada y un reloj de sol marcando las horas, aún hoy capta el protagonismo de la plaza. Hoy pertenece al concello como espacio cultural ofreciendo eventos, conciertos o exposiciones. En la planta baja se puede visitar el museo del Vino, ya que en este edificio histórico se ubica la sede del Consejo Regulador de la denominación de origen Rías Baixas.

Pazo de Mugartegui, fuente: Turismo de Galicia

Museo de Pontevedra.

Varios edificios históricos pertenecen y acogen las colecciones del Museo de Pontevedra. Fiel reflejo de la historia de la ciudad a lo largo de los siglos, posee valiosos restos arqueológicos como laudas gremiales y esculturas religiosas de las ruinas de Santo Domingo, artesanías, vidrios y cerámicas, arte gallego medieval y una pinacoteca.

Amanece un  nuevo día. Nos calzamos las botas. Cruzamos el largo puente del Burgo, de origen romano y decimos adiós a Pontevedra, con destino final Santiago de Compostela, la bella capital de Galicia y su inigualable plaza del Obradoiro: nuestra meta.

Camino Portugués

Mapa de lugares que ver en Pontevedra en un día:

1. Plaza y santuario de la Peregrina.
2. Convento de San Francisco.
3. Plaza de la Herrería.
4. Basílica de Santa María la Mayor.
5. Casa de Valle Inclán.
6. La plaza de la Leña.
7. Convento de Santo Domingo.
8. Plaza de la Pedreira.
9. Museo de Pontevedra.
10. Puente del Burgo.

Fuente: Google maps.

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