Siempre había soñado con viajar a Venecia en 2 días o tres. Hacer una escapada a la ciudad de los canales, atraída por su arte y su historia. Esas imágenes del carnaval de máscaras, las góndolas meciéndose con la brisa, las playas del Lido bajo la banda sonora de la Sinfonía de Mahler en aquella mítica película… Ha formado parte de mis anhelos desde que tengo uso de razón. Compitiendo en fama y belleza con Roma y Florencia ¿quién no quiere sumergirse en tal escenario?
Venecia al anochecer
Pero era una mancha en mi «currículo» viajero, mi destino «maldito»… Veréis: hace muchos años, había comprado un billete para volar con dos amigas a Venecia, pero una huelga de controladores hizo que nos quedáramos en tierra. Tiempo después, planeé volver a intentarlo, pero tuve que cancelar el viaje por un problema familiar. ¡A la tercera ha ido la vencida! Por fin he saldado mi deuda… Hermosa, saturada de turismo, cara y fotogénica en cada esquina, ¿ha merecido la pena visitar Venecia?
Gran Canal de Venecia desde el Puente de la Academia
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El precio: cuando la cerveza vale oro.
El primero en gritar que es un error viajar a Venecia es, sin duda, el bolsillo. ¿Una cerveza 8 euros junto al Puente de Rialto? ¿Un spritz -ese aperitivo típico con burbujas anaranjadas- en una plaza cualquiera por 9? En el top de los precios inflados, el paseo en góndola: 80€ por 30 minutos; 100€ si es al anochecer. Y eso que los gondoleros ya no cantan (¿lo hicieron alguna vez? En las películas, sí…) y reman con desgana bajo los puentes. Aún así, son cientos las góndolas que surcan los canales entre viejos palacios por cuyas puertas se cuela el agua sin pedir permiso. Tal vez me equivoqué de profesión…
Paseo en góndola por Venecia
Alojarse en el centro de Venecia: un lujo.
Aunque lo excesivo de este capricho de ir a una de las ciudades más visitadas del mundo ya lo intuí desde el momento de hacer una reserva. El precio de una habitación tampoco es una excepción en la escala de los «sablazos». Tras mucho buscar, conseguí un hotel por precio relativamente moderado en el casco histórico: el B&B La Terrazza Dei Miracoli en Cannaregio.
¿Su ubicación? Eso sí, inmejorable. A 5 minutos del Puente Rialto. Aún pagando más de 100€ por noche, conseguí una habitación minúscula con baño compartido… Pero sin duda fue la mejor opción de todas las que valoré por situarse, dentro del centro, en una ubicación tranquila y las vistas desde su terraza. El precio de dormir en Venecia.
Terraza del hotel en Venecia
Lo peor de visitar Venecia: la saturación de turismo.
Te preguntas si es un error viajar a Venecia nada más poner el pie en la estación de Santa Luzia y luchar por salir entre un bosque de maletas de ruedas. Turistas orientales con sus enormes cámaras de fotos que captarían el nido de una paloma en el tejado de San Marcos. Las estrechas travesías que conducen al corazón de la ciudad, el Palacio Ducal, son una riada. Tratar de tomar una foto al Puente de los Suspiros, un reto… Hay que abrirse paso a casi a codazos.
Turistas en San Marcos, viajar a Venecia
Sí, me diréis: la incongruencia. Quiero encontrar Venecia vacía, sólo para mí… Bueno no tanto, pero tal vez un poco menos insoportablemente intransitable. Sé que me enfado por la cantidad de gente egoístamente: tienen tanto derecho como yo a visitarla.
Puente de Rialto, viajar a Venecia
Toma nota: muy cerca de Venecia se encuentra la tranquila Treviso, conocida como la ciudad del agua. Ideal para huir del turismo masivo y los precios prohibitivos, ¡una gran sorpresa en el Véneto!
La bella Venecia…
Aunque, del horror inicial de no poder caminar paso al enamoramiento en momentos puntuales. En esos ratitos de soledad, ese perderme de la muchedumbre que abarrota los puntos claves que rodean al Gran Canal. Con las luces parpadeantes del atardecer. Venecia es linda, es auténtica por los callejones escondidas que rodean la libería Aqua Alta, la plaza de la iglesia de Santa María dei Miracoli, justo al lado de mi hotel…
Rincones más solitarios de Venecia
Y no es tan cara sabiendo buscar los lugares: mi amiga veneciana Roberta me conduce hasta lugares locales donde ellos huyen de los turistas. Bares donde tomar tapas y vinos espumosos por precio razonable. Existen: en la plaza y al cruzar los puentes aledaños al Campo San Giovanni e Paolo.
Librería Aqua Alta
¿Restringir el acceso a Venecia es una solución?
Entre vino y vino mi amiga me confiesa que la situación es preocupante: cada día se marchan de Venecia 3 personas, a vivir a otro lugar. El exceso de turismo tiene como consecuencia una ciudad inhabitable, con ruidos y precios astronómicos que los locales no pueden soportar. Se habla de restringir el acceso, poner tornos, un límite diario o incluso comprar una entrada… El punto álgido es la época estival, cuando atracan docenas de cruceros en el puerto de Venecia desembarcando a miles de pasajeros al mismo tiempo.
Muchedumbre de gente en Venecia
Todos queremos visitar esos lugares míticos. Conocer esos sitios que tanto hemos admirado en fotografías, catálogos, películas, canciones… ¿Pero es sostenible? ¿El turismo responsable no debería tratar de viajar hacia lugares menos conocidos que, al contrario que Venecia, serían felices de recibir algunos turistas? Difícil debate y aún más complicada solución. Aquí entono el mea culpa. No sé si fue un error viajar a Venecia: lo deseaba con toda mi alma. Pero es cierto que no pude disfrutar de la ciudad plenamente. Según me dijeron, la mejor época para ir a Venecia es noviembre y diciembre, cuando el frío y el acqua alta disuaden a las masas. Avisados quedáis.
Sitios de Venecia más tranquilos
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Venecia es el punto de inicio ideal para hacer una ruta en coche por los Dolomitas, Alpes Orientales de Italia.
¡No viajes a Italia sin seguro de viaje!
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Jordi Gil Adell
La verdad es que yo estuve en Venecia, la histórica Aqua alta del 13 de noviembre de 2019. La ciudad saturada, sin funcionar los cajeros automáticos, todo cerrado. Y la pobre gente intentando achicar agua. Era un panorama de desolación, y para nada romántico. Pero me queda un gran viaje, ( vivo en Barcelona) y posiblemente sea en esta ciudad. Me hospede, enfrente del cementerio de LA ISLA DI SAN MICHELE, ( desde la ventana de mi habitación veía el cementerio. Error, cruzar a las dos de la madrugada toda la ciudad y lloviendo no es nada agradable. En mi trabajo cuando limpiamos tenemos que poner nuestro nombre y yo firmo como EL VENECIANO, con eso está todo dicho. Fui en noviembre sin cruceros ni casi gente. Cuando los afortunados que se alojan en la ciudad y en Lido y Mestre desaparecen, tienes toda la ciudad para ti, no tiene precio. Y más en vísperas de la inundación del siglo, y ves como el agua va subiendo lentamente y lloviendo, y te apresuradamente a resguardarte en tu hotel, no se puede relatar. Como he dicho antes me queda un último gran viaje, Italia seguro, pero seguramente la ciudad elegida sea Venecia.