La visita a la catedral de Burgos en el VIII centenario
Castilla y León España

¡Felicidades Catedral de Burgos! 8 siglos de una joya Patrimonio de la Humanidad

Escrito por la
el
19 julio, 2021

Era un 20 de julio de 1221 cuando el obispo Mauricio y Fernando III “El Santo” colocaron la primera piedra de un templo que iba a convertirse en uno de los edificios góticos más majestuosos de toda la cristiandad. Cuarenta años después fue consagrada, aunque en los siglos venideros iría ampliando y definiendo su impresionante estructura que le ha otorgado la distinción de Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO -la única de España que lo es por sí sola-. La puerta del Sarmental, el Cimborrio gótico – plateresco -más obra de ángeles que de humanos según Felipe II-. La tumba de Mío Cid o la capilla de los Condestables, “catedral dentro de la catedral”… Aportan a quien la visita la sensación de caminar por un trocito de eternidad. Una emoción que se revela en cada estatua, cada detalle. Cada piedra delicadamente tallada de esta historia viva en el corazón de la ciudad de Burgos.

Visita a la Catedral de Burgos

Visita a la Catedral de Burgos

Burgos, ciudad medieval en expansión.

Por entonces, esta urbe medieval era capital del reino castellano – leonés, flamante y palaciega. Una ciudad con un continuo trasiego de peregrinos procedentes de toda Europa, gracias a la ruta jacobea del Camino de Santiago. La anterior catedral románica -donde se había desposado el rey Santo con doña Beatriz de Suabia, princesa germana, necesitaba un templo acorde a la importancia de Burgos. Se llamó a Maestros y Arquitectos franceses para alzar un gran santuario dedicado a la virgen María, inspirada en Notre-Dame de París y la catedral de Reims. A la vista está que el resultado sigue deslumbrando tras ocho siglos de vida: hoy por hoy, es uno de los monumentos imprescindibles de España.

Catedral de Burgos desde el mirador del Castillo

Catedral de Burgos desde el mirador del Castillo

Visita a la catedral de Burgos.

¿Y qué mejor ocasión que esta fecha especial para acercarse a conocer -o a redescubrir- una joya centenaria? Sígueme y te cuento qué no te puedes perder en una visita a la catedral de Burgos. ¡Empezamos por el exterior!

Fachada de Santa María: Pulchra es et decora.

Esbeltas agujas. Un rosetón cisterciense de seis puntas, por el que penetra la luz del sol. En la fachada occidental del templo nos contemplan los ocho primeros reyes de Castilla convertidos en piedra, testigos de todo lo acaecido en su reino: de Fernando I “El Magno” rey de León y conde de Castilla, al rey Santo promotor de la catedral. Junto a la Virgen con el Niño puede leerse la leyenda referida a María “Pura y Hermosa”, del cincel de Juan de Colonia en el siglo XV.

Fachada de Santa María

Fachada de Santa María

Puerta y fachada de la Coronería.

Bordeando la catedral de Burgos, en sentido de las agujas del reloj, la Coronería o Puerta de los Apóstoles es una belleza gótica con ángeles, escenas de la resurrección de los muertos y el Juicio Final atribuida a artistas locales a las órdenes del Maestro Enrique, quien se haría cargo más tarde de las obras de la seo leonesa. Hoy cerrada -solo se abre en determinadas celebraciones- antaño por esta puerta accedían a la catedral los peregrinos del Camino de Santiago. Al otro lado de la puerta se ubica la Escalera Dorada de Diego de Siloé, tesoro que contemplaremos en la visita al interior de la catedral de Burgos.

La puerta del Sarmental.

Desde la amplia plaza del Rey San Fernando una imponente escalinata gótica conduce a la que es hoy la entrada a la visita a la catedral de Burgos. Solo hay que pasar bajo el Pantocrátor con el libro de la Ley, protegido por los Cuatro Evangelistas, para penetrar en un templo solemne y sobrecogedor.

Fachada del Sarmental

Fachada del Sarmental

Nave Mayor: la leyenda del Papamoscas.

De nuevo dirigimos los pasos en el sentido de las aguas del reloj. Dejamos a un lado la capilla de la Visitación, San Juan de Sahagún y la de las Reliquias, desembocando en la Nave Mayor. A cada hora en punto, este entrañable personaje marca las horas: el Papamoscas es un muñeco autómata del siglo XVIII que abre la boca y mueve el brazo para el deleite de los más pequeños, acompañado del Martinillo. Según la leyenda, la figura pretendía ser “La mujer de la catedral”, una misteriosa joven que obsesionó a Enrique III y al que el artesano que la diseñó no supo hacerle justicia, fabricando una imagen un tanto grotesca.

El Papamoscas

El Papamoscas

En el lateral izquierdo es donde se sitúa la capilla del famoso Santísimo Cristo de Burgos. Escultura extremadamente realista, con fama de milagrosa, hasta 1835 se hallaba en el Monasterio de San Agustín, extramuros; hoy es una de las principales estrellas de la Semana Santa Burgalesa (fiesta declarada de Interés Turístico Nacional).

Capilla Mayor y coro.

El dorado y la policromía son protagonistas en el renacentista retablo mayor donde destaca la figura de Santa María la Mayor, a quien está consagrada la catedral de Burgos. No hay que perderse el monumental coro plateresco tallado en sillería de nogal, del siglo XVI. En este espacio duerme sueño eterno el religioso que colocó la primera piedra aquel 20 de julio de 1221: el obispo Mauricio.

Retablo Mayor de la catedral de Burgos

Retablo Mayor de la catedral de Burgos

Atención: antes de sucumbir bajo los encantos del Cimborrio, merece la pena echar un vistazo a la capilla lateral de Santa Ana, también llamada de la Concepción. Una obra de excepcional valor artístico: en el centro del retablo la mirada es atrapada por el abrazo de San Joaquín y Santa Ana. El Árbol de Jessé o el sepulcro del obispo Luis de Acuña son parte de este conjunto escultórico con la firma de Gil de Siloé.

Capilla de Santa Ana

Capilla de Santa Ana

El Cimborrio de la catedral de Burgos: la linterna del Renacimiento. 

Hay que dedicarle una mirada larga, tanto en el exterior como el interior del templo. Por fuera, sus torres adosadas y agujas se alzan sobre el cielo azul de Burgos; los ventanales aportan luz natural al interior a modo de una gigantesca linterna con exquisita decoración renacentista. La mano del artista que logró tal proeza fue la de Juan de Vallejo. Bajo la bóveda de estrellas que remata el Cimborrio se encuentra la tumba del Cid Campeador, héroe burgalés por excelencia, y su esposa doña Ximena.

Cimborrio de la catedral de Burgos

Cimborrio de la catedral de Burgos

Pero sigamos la visita… Es de obligada parada la Escalera Dorada, de Diego de Siloé, obra renacentista en la que se inspiró el arquitecto de la Ópera de París para su gran escalera, siglos después. Así como la Girola, con el sepulcro del humanista Pedro Fernández de Villegas, ejecutado por Simón de Colonia.

La Escalera Dorada

La Escalera Dorada

Capilla del Condestable.

En “la catedral dentro de la catedral” una bella sepultura guarda los restos de Pedro Fernández de Velasco y Mencía de Mendoza y Figueroa, condestables de Castilla. Bajo una cúpula estrellada se abre una espléndida capilla.  Varios retablos, pinturas, entre las que destaca una Magdalena de un discípulo de Da Vinci.

Capilla del Condestable, visita a la catedral de Burgos

Capilla del Condestable, visita a la catedral de Burgos

El claustro y museo catedralicio.

Desde las cristaleras de colores de los pasillos del claustro se puede contemplar el Cimborrio y otros detalles exteriores de la bella seo burgalesa. Motivos vegetales adornan las arquerías y en las galerías laterales se encuentran sepulcros de piedra: la mayoría son de altos cargos eclesiásticos que sirvieron en la catedral de Burgos.

Claustro de la catedral de Burgos

Claustro de la catedral de Burgos

Con la visita del claustro se incluye el museo de la Catedral, con varias reliquias. El cofre del Cid se custodia en la capilla del Corpus Christi, baúl medieval que según la tradición fue usado por el héroe en sus peripecias. El Archivo catedralicio es otro tesoro, albergando entre otros antiquísimos documentos varios códices medievales y el referente a la fundación del Infantado de Covarrubias, “la cuna de Castilla”.

Cofre de Mío Cid, visita a la catedral de Burgos

Cofre de Mío Cid, visita a la catedral de Burgos

Echa un vistazo a esta Ruta del Cid Campeador por la ciudad de Burgos.

Eventos por el VIII Centenario de la Catedral de Burgos.

Todos los espacios descritos es lo que se puede recorrer en una usual visita a la catedral de Burgos. Ahora bien, por la fecha tan señalada como es el VIII Centenario se creó en la ciudad de Burgos una fundación. ¿El objetivo? Promover actividades culturales durante los años anteriores y posteriores al evento. Miles de velas distribuidas a los pies del templo al anochecer, conciertos, exposiciones… Se han realizado cuando lo ha permitido la Pandemia. En esta semana, los niños cantores de Viena invadirán con su música las naves de la catedral desde el altar Mayor. Toda la programación se puede consultar en la web oficial: Catedral de Burgos 2021.

LUX: las Edades del Hombre en la catedral.

¿Otro motivo para visitar la catedral de Burgos este 2021? LUX, la XXV edición de las Edades del Hombre. Centrada este año en la figura de la virgen María -con el subtema de la luz en las catedrales góticas-, se exhibe en la seo burgalesa. También en Carrión de los Condes y Sahagún. Una exposición artística y religiosa que se puede visitar hasta diciembre de 2021.

LUX, 25 edición de las Edades del Hombre

LUX, 25 edición de las Edades del Hombre

¿A qué esperas este año para visitar la ciudad de Burgos?

TAGS

DEJA UN COMENTARIO