Año 79. Érase una vez un próspero pueblo de pescadores y comerciantes a orillas del mar llamado Herculano. La noche del 24 de agosto comenzó a temblar la Tierra. El Vesubio desató su furia escupiendo nubes de lava, fuego y ceniza. Sus aterrorizados habitantes trataron de huir, en vano. En la ciudad vecina las escenas de pánico se repetían entre gritos y confusión. El volcán los abrasó, devoró sus vidas en unos instantes. Sepultó las villas romanas, los mosaicos de Poseidón y Hércules, las fuentes de ninfas… en lodo y lapilli. No hubo un nuevo amanecer para Herculano y Pompeya.

Herculano y Pompeya, la furia del Vesubio

Visita a Herculano y Pompeya, un viaje al S.I. 

Nápoles. Me despierto en la caótica capital mundial de la pizza para hacer una de esas excursiones más deseadas: visitar las míticas ciudades de Herculano y Pompeya, dos villas romanas del siglo I casi intactas por culpa de una gran tragedia que sin embargo les otorgó inmortalidad y fama mundial. Desde Nápoles es fácil llegar en transporte público: el tren rodea el Vesubio con parada en Ercolano y Pompei (línea Circumvesuviana). En mi caso, alquilamos un coche para movernos por la Campania a nuestro aire, ya que también queremos explorar la costa Amalfitana y las espectaculares ruinas griegas de Paestrum. Planes perfectos para una escapada a Nápoles y alrededores en 3 ó 4 días.

Otra opción más sencilla -para quien no quiera desplazarse en tren o alquilar un coche- es reservar un tour a Pompeya, Herculano y el Vesubio.

Villas de Pompeya

Herculano: la Villa de los Papiros. 

Se cuenta que los habitantes de Herculano, pequeña ciudad de mercaderes y veraneo de los patricios de Roma, eran más cosmopolitas y cultos que sus vecinos de Pompeya. Sin embargo, cometieron un error fatal. Estaban habituados a que el Vesubio, la montaña sobre la que desde que tenían memoria se asentaban sus viviendas, de cuando en cuando exhalaba una nube oscura desde la cima y le restaron importancia. Esta vez fue diferente. La erupción se abrió paso en una ola de fuego y ceniza por las laderas hasta el mar, arrastrando en su cólera todo lo que se interpuso. No hubo supervivientes.

Ruinas de Herculano

Las silenciosas ruinas de Herculano.

Hoy las ruinas de la pequeña urbe consagrada al héroe grecorromano están cercadas, como una isla, por la moderna ciudad de Ercolano, a las que se accede a través de una pasarela previo pago en taquilla de 13 euros por persona. Un pie en la calle empedrada y ya estoy en el siglo I. El silencio recorre las travesías que hace dos mil años serían un trajín de vendedores, carros y caballos. Injustamente, Herculano es mucho menos visitada que la popular Pompeya.

Calles de Herculano
Visita a Herculano, Nápoles

Termas y viviendas de Herculano.

Es increíble el estado de conservación de los edificios: las termas de hombres y mujeres, con el exquisito mosaico del Tritón; la Palestra, destinada a los ejercicios gimnásticos; las viviendas romanas con su patio, alcobas y cocinas, los frescos y mosaicos que decoraban las estancias en las que se organizaban fiestas y convites, se celebraba la vida… Y todo ello «gracias» a la ceniza que cubrió y preservó estos tesoros del Patrimonio Mundial como testigos del pasado ya extinto.

La Palestra, Herculano
Mosaico de Hércules, Termas masculinas, Herculano
Casa de Neptuno y Anfititre en Herculano

La villa de los Papiros.

Al sur, con vistas al mar el más lujoso de los palacios: el del suegro de Julio César, Lucio Calpurnio, conocido como la villa de los Papiros. En la terraza de M. Nonio Balbo el que fuera cónsul de Creta y Cirine alza la mano al cielo, tal vez pidiendo clemencia. En el puerto, el hallazgo más macabro: más de 200 esqueletos que buscaron refugio en los cobertizos para las embarcaciones.

Monumento funerario a M. Nonio Balbo
Villas de Herculano
Hercules borracho, Herculano

Visita a Pompeya, la joya romana de la Campania. 

Digo adiós a Herculano y sigo bordeando la base del Vesubio hasta la famosa Pompeya. Otra ciudad hercúlea ya que según la tradición la fundó el héroe tras desembarcar victorioso, desfilando con «pompa» tras un séquito de bueyes que había robado de Hispania. El volcán permanece dormido en una inofensiva estampa. Sin embargo, dicen los expertos que una gran caldera arde en las profundidades dispuesta a volver a rugir…

El Vesubio desde Pompeya

¿Cuándo? Las trompetas de los ángeles anunciadores de la basílica de la moderna Pompei están preparadas para proclamar el Juicio Final. Al término de la calle principal se ubica la entrada a la ciudad romana que sucumbió a la ira del volcán: Pompeya.

Basílica de Pompei

La tragedia de Pompeya, por Plinio el Joven.

El cronista Plinio el Joven dejó por escrito constancia de la tragedia. Acostumbrados a los movimientos sísmicos, los habitantes que aún quedaban en Pompeya tras el último terremoto tampoco lo vieron venir. Bajo un cielo oscurecido, los gladiadores entrenaron por última vez en la arena del anfiteatro. Las tabernas y el lupanar permanecieron abiertos y rebosantes de clientes hasta que fue demasiado tarde. Los techos se vinieron abajo en cuestión de minutos en lo que debió ser similar a un bombardeo. La ceniza cubrió suelos y paredes. Enterrada y olvidada durante siglos, fue el rey Carlos III de España, nacido en Nápoles, quien impulsó el redescubrimiento de la ciudad y su excavación a mediados del XVIII.

Anfiteatro, Pompeya
Gente huyendo, Pompeya

Lugares más importantes que visitar en Pompeya.

Difícil calcular el tiempo para recorrer Pompeya; al menos gasto cuatro horas ya que la ciudad es inmensa. Los lugares emblemáticos como el Foro, el centro cívico de la gran urbe con el templo de Júpiter; las termas Estabianas y las centrales, las villas más opulentas como la casa del Fauno o la del Poeta Trágico, a cuya entrada se encuentra el mítico mosaico con la inscripción «Cave Canem»; o el Teatro Grande están repletos de turistas. Sin embargo, al perderme por sus calles laterales y villas, alejándome del Foro, el empedrado está casi desierto. Estoy sola en Pompeya.

Fotos de Pompeya…

Arco de entrada a Pompeya
Gran Anfiteatro, Pompeya
Foro, Pompeya
Frescos, casa de Pompeya
Calle empedrada, Pompeya
Termas de Pompeya

La Villa de los Misterios de Pompeya. 

Merece la pena caminar hasta al final, a las afueras de Pompeya, donde se alza la impresionante Villa de los Misterios. Rituales prohibidos por Roma, las bodas de Dionisio y Ariadna… Los frescos que decoran las paredes de salones y alcobas de esta vivienda de lujo cuentan historias que son obras de arte conservadas en un estado casi perfecto. Quién sabe qué fue de sus ricos patronos, si abandonaron las bellas galerías para siempre huyendo por el jardín colgante, logrando ponerse a salvo… O se rindieron también en aquella noche funesta, dejándonos como testigo su legado a nosotras, herederas e intrusas no invitadas de la posteridad.

Villa de los Misterios, Pompeya
Frescos de la Villa de los Misterios, Pompeya

Visitar Herculano y Pompeya. Datos prácticos. 

  • Horario de Herculano: abierto de lunes a domingo, de 9 a 19:30 en verano; 9 a 17 en invierno. La última admisión es hora y media antes del cierre. Cerrado el 1 de enero, 1 de mayo y 25 de diciembre.
  • Precio de Herculano: 13 euros sitio arqueológico. Visitar el museo: 3 euros más.
  • Horario de Pompeya: abierto de lunes a domingo, de 9 a 19:30 en verano; 9 a 17 en invierno. La última admisión es hora y media antes del cierre. Cerrado el 1 de enero, 1 de mayo y 25 de diciembre.
  • Precio de Pompeya: 18 euros.
  • Entrar gratis a Herculano y Pompeya es posible: el primer domingo de cada mes.
Templo, Pompeya

Alojamiento en Herculano y Pompeya. 

Los cuatro días que pasé explorando la Campania me alojé en Boscoreale, un tranquilo pueblo junto a Pompeya.  Reservé un amplio apartamento de dos habitaciones y dos baños donde poder cocinar: el Real Palace Pompei Vesuvius.

Mosaico, Pompeya

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Publicado por cosmopolilla

La vida es el arte de lo imposible. Licenciada en Comunicación Audiovisual, mi pasión es viajar. Desde 2013 lo cuento en mi blog.

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11 comentarios

  1. Pues me han entrado ganas de ir por allí viendo lo bien conservado que está todo. La verdad es que no tenía ni idea… Si no fuese por la tragedia humana casi que habría que dar las gracias al Volcán ya que gracias a la erupción podemos ver una ciudad romana de verdad, y no imaginar como era por 4 restos.

    Un abrazo

  2. Que buenos recuerdo me ha traído este post. Creo que la visita a Pompeya (y también a Herculado) han supuesto uno de los momentos más emocionantes durante nuestros viajes por Europa. Por mucho que te cuenten hasta que estás allí no te das cuenta de todo lo que se ha conservado. De verdad es que no hay que poner nada de imaginación en este caso.

    1. Sí, es increíble el estado de conservación de algunas casas por dentro con los frescos casi intactos, y los tejados porque se vinieron abajo con la explosión, si no estarían casi para entrar a vivir…

    1. Algo leí de que llegó a estar tan mal que la UNESCO amenazó a Italia con quitarle el título de «Patrimonio de la Humanidad», ¡imagínate! Así que supongo que se pusieron las «pilas» y se esforzaron para mantener a estos tesoros que son únicos en el mundo.
      Un abrazo

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