Siglo IV a.C. El cabo de Torres es una península que se adentra al mar Cantábrico en el norte de España, dominando ambos lados de la costa en un privilegiado enclave. En los días despejados, se divisan los altos Picos de Europa, teñidos de nieve. Este altozano azotado por las olas y el viento es elegido por una tribu celta para asentarse, trazando el mayor recinto fortificado marítimo de toda la costa de los astures. Aquí vivirán durante centurias, dedicados principalmente a la metalurgia, hasta el siglo I, era de la llegada de los romanos a Hispania. Colonizado, ambas culturas se fusionarán y continuarán habitando este castro de nombre Noega hasta su abandono, cien años después, con la fundación de Gijón. Hoy, el Parque Arqueológico – Natural de la Campa Torres por su relevancia es una de las visitas imperdibles que hacer en Gijón.
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La Campa Torres, una visita al pasado prerromano de Gijón.
A 7 kilómetros al oeste de Cimavilla, el barrio alto de Xixón, el paisaje ha sido notablemente modificado por la mano del humano. Bajo el complejo arqueológico se extiende el gran puerto de El Musel con sus barcos y grúas, en el distrito de Jove. Un mar de brillo plateado, en calma absoluta, protagoniza el horizonte. La montaña sobre la que se asientan los vestigios de los pueblos antiguos es hoy un prado verde y húmedo, salpicado de florecillas. Magnífico lugar para pasear, disfrutar de las vistas además de aprender sobre los cilúrnigos, uno de los veintidós pueblos citados por el historiador romano Plinio el Viejo sobre los astures.
Según las antiguas crónicas, los cilúrnigos provienen del celta «cilurnum», que significa “caldero”. Y es que los habitantes de la Campa Torres era un pueblo dedicado a la fabricación de calderos con remaches. Este nombre aparece esculpido en una estela funeraria que se conserva en la Torre del Reloj en Cimavilla, Gijón.
El museo de la Campa Torres.
La primera parada dentro del complejo: el museo y centro de recepción de visitantes. Edificado sobre un búnker de la Guerra Civil Española que tenía como objetivo defender El Musel, en su interior se exhiben maquetas y reproducciones, además de un audiovisual que explica la historia de este lugar. Ayuda inestimable para interpretar los senderos que discurren a lo largo de todo el sitio arqueológico.
El itinerario está trazado con carteles y señales en trece puntos de observación que explican cada lugar, recreando en la mente un dibujo de lo que pudo ser este poblado hace dos milenios. Las piedras de la muralla defensiva del castro -el paseo de Ronda-. El foso y contrafoso, gran zanja que excavaron los astures llegando a los ocho metros de profundidad o los pozos artesanos.
Consejo: hay que prestar especial atención al entorno, recrearse en el arrebatador paisaje. Se trata de un espacio arqueológico – natural: en el Cabo de Torres la diversidad de las especies es grande, estando protegido. En él hay miradores de aves y referencias a las especies vegetales que tapizan tierra y roca hasta llegar al mar.
El castro de Campa Torres.
Sin duda la parte más interesante del parque es la pradera llana en una meseta, zona donde se localizan los restos de antiguas casas y se han recreado dos viviendas típicas: la astur, con planta circular, correspondiente al castro prerromano y la casa romana, ya de planta cuadrada, de época posterior. Los hallazgos en las excavaciones -vasijas, monedas, objetos de la vida cotidiana- se pueden contemplar en el edificio anexo. Una pequeña ventana a la historia de Xixón dos mil años atrás en el tiempo.
El recorrido tiene su fin en el faro del Cabo de Torres, edificado en 1923. Una didáctica visita con exposición permanente sobre la historia del cabo; en su parte alta, una biblioteca y sala de documentación.
Datos prácticos para visitar el Parque Arqueológico – Natural.
- La entrada es gratuita.
- Horario: invierno (octubre a marzo), de 10 a 17 horas de martes a domingo. Horario de verano (abril a septiembre) de 10:30 a 19 horas.
- Cerrado: todos los lunes del año. 1 y 6 de enero. Martes de Carnaval. 15 de agosto. 24, 25 y 31 de diciembre.
Más información en la web oficial de Turismo de Gijón.