Llueve sobre las piedras gastadas de Córdoba la Vieja. Es este un otoño húmedo, como hace años que no se recuerda. Las noches son frescas y en la madrugada la torre de la Calahorra se despierta entre espesa neblina. El Guadalquivir desciende de las serranías en su camino hacia el mar color chocolate, derramándose por la vega. Invadiendo los campos de cultivo vigilados por la fortaleza medieval del castillo de Almodóvar del Río. Allí se dirigen mis pasos.

Río Guadalquivir desde el castillo de Almodóvar

Castillo de Almodóvar, la locura de un noble romántico.

Almodóvar del Río es un pueblo mediano y blanco, como tantos de Andalucía, situado a 16 kilómetros de Córdoba capital. Desde lejos se percibe la figura romántica de las torres de su castillo, coronando la colina. Asciendo por una cuesta inclinada apretando el paso, ya que vuelve a llover. Es este un enclave estratégico; dado lo escarpado del terreno, el castillo nunca necesitó foso para defenderse de los ataques.

Acceso al castillo de Almodóvar

La puerta de la fortaleza es de negra forja. No es de esas macizas que dan ganas de gritar «Ah del castillo» como en todas las películas de héroes medievales. Además no hay ningún caballero de noble armadura al otro lado: permanece abierta, invitando a la visita. Por suerte para nosotros, corren tiempos mucho más pacíficos que los que llevaron a alzar estos muros sobre la atalaya. Una proeza que realizaron los Omeyas, los primeros árabes que desembarcaron en la península.

Llueve en el castillo de Almodóvar

El primitivo baluarte bereber fue usado para menesteres militares durante toda la Edad Media, época de continuas escaramuzas entre moros y cristianos. Conquistada Córdoba pasó a manos de los castellanos, quienes reformaron el castillo de Almodóvar acomodándolo para residencia real. Aquí está la cámara en la que residió Pedro I «El Cruel» y más tarde Enrique II de Trastámara, como se representa solemnemente en la Sala del rey. De manos de la corona cambió a la nobleza en varias ocasiones hasta acabar en 1629 en las de Francisco del Corral y Guzmán, caballero de la orden de Santiago, quien se instaló en el castillo de Almodóvar, ahora su señorío.

Sala del Rey

Pasaron los siglos. El viento y la lluvia azotaron las piedras del castillo de Almodóvar sin piedad, desgastando sus contornos. Abandonado en el olvido, durante muchos años fue solo una silueta que identificaba el perfil del pueblo, añorando el orgullo de tiempos mejores. Un lugar maldito, en el que según la leyenda vaga por sus almenas una dama de blanco. Quién sabe si será el espíritu errante de Doña Juana de Lara, esposa del hermanastro de «El Cruel», quien estuvo presa en el castillo por orden del monarca.

Castillo de Almodóvar

Lo cierto es que cuando lo heredó el XXII Conde de Torralva, a comienzos del S.XX, la fortaleza se encontraba en ruinas, siendo hogar de cuervos y pasto de las matas. Pero Rafael Desmaissieres y Farina era un noble culto. De aire soñador y carácter excéntrico, el joven heredero viajó por el mundo y a su regreso se enamoró de su viejo castillo. Se obsesionó con restaurar y devolverle el esplendor medieval.

Castillo de Almodóvar

Al arquitecto Alfonso Fernández Casanova le encargó  su restauración, empeñando en esta gran empresa toda su fortuna y su vida. Se cumplió su sueño, aunque de manera póstuma ya que don Rafael nunca lo vio. El castillo de Almodóvar renació como antaño, cuando Pedro I de Castilla y los caballeros de su corte caminaban por el Patio de Armas y la Torre del Homenaje.

Torre del Homenaje, castillo de Almodóvar

Castillo de Almodóvar: de leyenda a escenario de Juego de Tronos.

Su histórica estructura ya acaparó la atención de Hollywood y sedujo a la gran pantalla en los años 80, siendo escenario de «Harem», con Ava Gadner y Omar Sharif. Treinta años más tarde, el castillo de Almodóvar está listo para ser inmortalizado para siempre en una de las grandes series de todos los tiempos: Juego de Tronos. ¿Será el hogar de los Lannister? ¿El escenario de una nueva trama? Pronto lo averiguaremos. Tened por seguro que el invierno está llegando a Almodóvar.

Juego de Tronos. Fuente: Europapress.com

Publicado por cosmopolilla

La vida es el arte de lo imposible. Licenciada en Comunicación Audiovisual, mi pasión es viajar. Desde 2013 lo cuento en mi blog.

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10 comentarios

  1. Qué pena que don Rafael no viera su sueño hecho realidad… pero para compensar, ahora le mundo entero lo va a poder disfrutar con esa serie de éxito que es Juego de Tronos (confieso que debo ser de las pocas que no la siguen).
    Un beso

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