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La vuelta al mundo en diez desayunos

Escrito por la
el
22 octubre, 2015

Sale el sol y comienza un nuevo día, una nueva aventura. Hoy te has despertado con la primera llamada a la oración del muecín. O quizás con la conversación un tanto subida de tono de los monos aulladores entre las ramas. O tal vez con el rumor de las olas del océano. O la nada absoluta que emana del desierto…

Amanecer en Erg Chebbi

El ritual de ducha, vestirse para el momento, incluso recoger el equipaje es la tónica que suele marcar la temprana hora. ¡Y el desayuno! Sin duda una de las mejores formas de acercarse a una cultura, una región, es saboreándola. La primera comida del día suele ser su fiel reflejo, mezcla de los alimentos más usuales de la parte del planeta en la que hoy estamos de paso…

Dulce o salado. Contundente o ligero. Sabroso. Frutal. A veces extraño…

Desayunos del mundo:

1. Bali, el desayuno de los dioses.

Empieza el día en Ubud, el corazón de «la isla de los dioses», con olor a incienso bajo un Brahma de piedra. En la casa de huéspedes en la que me alojo se desayuna en el porche, junto al estanque de peces de colores y flores de loto. Nuestra joven anfitriona nos ofrece kopi (café indonesio), un sandwich relleno de compota a base de dulce de plátano y un plato de sandía recién cortada. Refrescante y delicioso.

Desayuno en Bali

Desayuno en Ubud, Bali

2. Mongolia, la sobriedad de la vida nómada.

El frío envuelve la yurta en el Terelj. La estufa se apagó hace ya unas horas. El cacareo de las gallinas y el relincho de los caballos son el despertador en este paisaje perdido entre los bosques y las montañas de Mongolia. En la yurta común del campamento nos recibe un gran cuenco de Batan, una sopa blanquecina con trocitos de ternera y té, ideales para recuperar el calor corporal.

Vuelta al mundo en diez desayunos

Sopa Bantan, Mongolia

3. Siberia, entre Europa y Asia.

Volamos al norte. La Rusia asiática está a miles de kilómetros de su capital, Moscú. Sin embargo, para comenzar el día en un bar cualquiera encontramos casi lo mismo que al otro lado de los Urales: café con leche y un par de blini, entre tortilla y crêpe fino, aderezado con crema de yogur natural. Ligero y sabroso.

Desayuno en Irkutsk

4. Vuelta al mundo en diez desayunos: sabor mediterráneo en Turquía.

Amanece en la Capadocia. Cientos de globos decoran el cielo azul de verano. Nada mejor que comenzar la jornada con un fuerte té turco y pan acompañado de crema de queso, pepino, tomate y aceitunas. Se nota que estamos en un lugar turístico: a lo tradicional han añadido un poco de mermelada.

Desayuno turco

5. Comida para todo el día en Polonia.

¿Quién dijo hambre? En Polonia he probado el más contundente, ideal para no comer hasta por la noche: una tortilla rellena de jamón, queso y vegetales, coronada por bacon y tomates. El café latte remata este desayuno de titanes una elegante cafetería en el bello casco viejo de Varsovia.

Más que desayuno «brunch» en Varsovia

6. Francia, el petit-dejeneur más dulce.

Antes de subir a la torre Eiffel, el sacre Coeur de Montmartre o perderse por el barrio Latino, quién se resiste a los bollos recién horneados rellenos de chocolate, crema o simplemente un tradicional croissant. No te olvides de tu café au lait o noisette (cortado). Oh là là.

Petit Dejeneur

Petit Dejeneur

7. Vuelta al mundo en diez desayunos: miel y té en Marruecos.

De dulce tampoco andan faltos en Marruecos. Antes de partir a las dunas doradas del desierto la primera comida del día consiste en una tetera de exquisito té a la menta, acompañado de pan con mantequilla y miel. Nunca puede faltar el té que, la verdad, ¡se toma a cualquier hora del día!

Té de menta en Larache

8. Escocia, un desayuno para carnívoros.

En la tierra de William Wallace tienen claro que se combate mejor al frío y la lluvia con un generoso plato de salchichas, beans (judías con tomate), huevos (fritos o revueltos), tomate a la plancha, jamón de york, champiñones y haggis, el plato nacional a base de pulmón, hígado y corazón de cordero. Según últimos informes, no sería muy recomendable por la OMS…

Fuente: http://www.poreuropa.com/

Fuente: http://www.poreuropa.com/

9. Vuelta al mundo en diez desayunos: Costa Rica, al rico gallo pinto.

A otro lado del océano sigue cayendo la lluvia, pero de forma torrencial, en el bosque tropical lluvioso. No importa: dura tan sólo un ratito. Antes de ir a la playa lo mejor es refugiarse y desayunar un rico vaso de aguamiel y gallo pinto: frijoles, huevo, arroz y tomate

Gallo Pinto

Mi primer desayuno en Costa Rica

10. Desayuno Andaluz, el de mayor salero.

De vuelta al sur de España y mi desayuno preferido: crujientes tostadas de tomate con aceite de oliva vírgen, zumo de naranja natural y un café con leche.

Desayuno en Granada

Desayuno en Granada

¡Es tu turno! ¿Cuál es el desayuno que más te ha sorprendido en un viaje?

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45 Comentarios
  1. Responder

    Patrizia Vitelli

    22 octubre, 2015

    Qué hambre de post, por Dios jajajaja

    Me quedo con el desayuno andaluz porque la tierruca tira y le pondría unas buenas lonchas de jamón de Trevélez a esas tostadicas <3

    Hecho mucho de menos los banana pancake de Indonesia y las tostadas francesas de Estados Unidos. Los dejaré para alguna mañana en la que me despierte con buen humor (y tiempo) para cocinar 🙂

    Un beso

    • Responder

      @lacosmopolilla

      22 octubre, 2015

      Ay, el jamón de Trevélez cómo no, ¡qué rico! Sí, una barre para casa, qué le vamos a hacer. De Indonesia estuve dudando si poner esa foto en Ubud u otra que tenía de un riquísimo banana pancake que desayuné en Kuta a precio de risa… ¡Qué ganas de volver!
      Un besazo 🙂

  2. Responder

    Diabarama

    22 octubre, 2015

    Ostras con Polonia… jajajaja! Mi desayuno en Varsovia era contundente si querías. Yo estaba en un hotelazo de cinco estrellas, porque allí te cuesta ná y menos y llevaba ya casi tres semanas de viaje y me apetecía descansar. Era el desayuno buffet normal, mucha tarta y bollo y fiambres y tal y cual. Lo que sí tenían era un cocinero que te hacía los huevos a tu gusto: revueltos o en tortilla, y la tortilla con el relleno que quisieras. Tengo que decir que la experiencia cinco estrellas, fatal: ha sido la única vez que me han robado en un hotel.

    • Responder

      @lacosmopolilla

      22 octubre, 2015

      ¡Sí que eran contundentes! Los desayunos buffet de los hoteles es lo que tiene, que en todos son iguales y no descubres lo que desayuna la gente de normal o lo típico… En esta cafetería del centro de Varsovia le pregunté específicamente a la camarera cuáles eran los desayunos polacos y me señaló la tortilla esta gigante y un par de desayunos más, en esencia dulces y yo como soy más de salado… Qué mal lo de que te robaran, a mí nunca me ha pasado (cruzo dedos) y mira que he estado en hostels cutres y que no tenían ni para guardar las mochilas. En fin, malas experiencias, espero que no fuera nada que no se pudiera reemplazar o que te fastidiara mucho. Un besazo

      • Responder

        Diabarama

        24 octubre, 2015

        Bah, las cosas solo son cosas. Era básicamente dinero. Otra historia que contar 😉

  3. Responder

    Ori

    22 octubre, 2015

    El desayuno andaluz es el mejor desayuno del mundo mundial!! (y las arepas jajaj). Me acuerdo también del pancito que nos daban en Marruecos !Que bueno estaba¡

    • Responder

      @lacosmopolilla

      22 octubre, 2015

      El pan en Marruecos está muy rico, recuerdo ir a Assilah a comprarlo al horno. Y luego con tomates y zumo de naranja natural que están muy ricas y además son baratas je je ¿te puedes creer que no he probado las arepas? ¡Tengo que poner remedio ya!

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