Amiga, te preguntas si viajar a Croacia es una buena idea. Si podría ser el destino ideal para esas merecidas y ansiadas vacaciones. No lo dudes. Si tuviera que elegir una palabra para definir el país sería el de “completo”. A orillas del Adriático se extiende una larga costa escarpada cubierta de bosques mediterráneos, montañas, islotes solitarios -antiguos refugios de piratas- con aguas azules y cristalinas. Pero en su interior aguardan otros tesoros naturales: los lagos de Plitviche o las cascadas del Parque Nacional de Krka. Para amantes del arte, la historia clásica y la cultura verán sus deseos colmados ante el imponente anfiteatro romano de Pula y en las coquetas ciudades de la antigua República Veneciana como Rovinj. De Istria a Dubrovnik pasando por su sorprendente capital, Zagreb, todos esos lugares que ver en Croacia justifica organizar una ruta en la que, créeme, 15 o incluso 20 días son insuficientes.
Lagos de Plitvice
Toma nota: un consejo para viajar a Croacia:
Te en cuenta que si planeas tu viaje a Croacia en agosto puede hacer un calor intenso, además de estar muy saturada de turistas, especialmente Dubrovnik. Por eso, si hay posibilidad, es mucho mejor viajar a Croacia en septiembre, que aún hace buen tiempo o en temporada baja para encontrar precios más económicos y mucha menos gente.
Dubrovnik, razones para viajar a Croacia
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Contenido del artículo
Razones para visitar Croacia:
1 – Su apabullante naturaleza.
Frente a la ciudad de Zadar se ubica el Parque Nacional de Kornati. Espacio natural protegido compuesto por 140 islas -casi todas ellas deshabitadas- y que se puede visitar tomando un barco o contratando una excursión. Tierra adentro, los lagos de Plitvice con su color turquesa, bosques y cascadas son un escenario de fantasía en el que dan ganas de quedarse a vivir. Amiga, si me preguntas por mi lugar favorito de Croacia te señalaría este, sin duda.
Plitvice
Aunque, a la hora de viajar a Croacia, este parque sea el más conocido, también existen otros lugares donde disfrutar de la naturaleza más pura: el Parque Nacional de Krka, donde a diferencia de Plitvice sí está permitido el baño en la cascada inferior, es un refrescante y verde lugar donde hacer un recorrido entre pasarelas por antiguos molinos y pozas naturales. ¡Y a tan sólo 15 minutos en coche de Sibenik! Otros parques naturales menos típicos o populares, y por lo tanto con menor afluencia de visitantes en el país croata son el Parque Nacional de Risnjak, al norte de Rijeka. En la frontera con Eslovenia se ubican las montañas de Žumberak and Samobor: un paisaje frondoso y alpino donde hacer rutas de senderismo. Al sur, frente a las costas de Dubrovnik, el Parque Nacional de la isla de Mljet ofrece playas vírgenes, grutas, diversidad de fauna y flora y ruinas antiguas. Y esto sólo por citar algunos.
Cascadas del Parque Nacional de Krka
2 – Ciudades venecianas: Rovinj.
Si eres más urbanita, o te gusta combinar naturaleza con patrimonio, no te puedes perder hacer una ruta por la península de Istria, al noroeste de Croacia. La encantadora Rovinj, ciudad que durante 500 años perteneció a la República Independiente de Venecia, enamora. Con el alto campanile de Santa Eufemia, sus estrechas travesías con arcos, pasadizos y plazuelas con ropa tendida… Rovinj es de cuento.
Rovinj, Istria
3 – Patrimonio romano: Pula.
El Imperio romano se extendió por todo el Mare Nostrum, conquistando ciudades y fundado colonias. Sus vestigios están presentes en varias zonas del Adriático, por donde navegaban a sus anchas. La ciudad donde mejor se conservan las huellas romanas es Pula, en Istria. La majestuosa Arena en nada tiene que envidiar al Coliseo. Pero es que al caminar por su centro histórico todo está impregnado de esa gran civilización que dominó el mundo antiguo: el Foro, el Teatro, el templo de Augusto, los Arcos antiguas puertas de acceso a la ciudad…
Puerta romana en Pula
Siguiendo la línea de la costa hacia el sur, en Zadar -Dalmacia- una gran columna corintia en la plaza de los Cinco Pozos recuerda el origen romano de esta ciudad, así como el foro, en la explanada donde se asienta la iglesia bizantina de San Donato.
Zadar, razones para viajar a Croacia
4 – Escenario de Juego de Tronos para frikis.
Es inevitable, para fans de la serie, no entonar la banda sonora del tema principal que da paso a las tramas y traiciones de los Siete Reinos mientras se recorren las murallas de Dubrovnik. Convertida en un gran plató al aire libre como Desembarco del Rey, visitar Dubrovnik es el sueño friki de los amantes de una de las grandes series de todos los tiempos. Aunque no es el único lugar de Croacia donde se rodaron escenas: también Sibenik se transformó en Braavos y el casco viejo de Split, en la Bahía de los Esclavos donde vive varias desventuras Daenerys Targaryen.
Vistas de Dubrovnik, razones para viajar a Croacia
Sibenik, escenario de Juego de Tronos en Croacia
5 – La capital: Zagreb, una pequeña Viena.
Cambiar de tercio totalmente e incluso pensar que se está en otro país. Alejada de la costa, la capital del país no suele ser una opción a la hora de viajar a Croacia, ya que queda muy a desmano de Dubrovnik -el foco turístico por excelencia- o la pintoresca costa de Dalmacia. Sin embargo, a pesar de que llevaba bajas expectativas a mí explorar Zagreb me gustó mucho. Más cerca de Centroeuropa que del Mediterráneo, con tranvías, palacios y reminiscencias del Imperio Austrohúngaro, su extensa red de museos y monumentos, así como los cafés vieneses justifica desviarse a propósito.
Zagreb, la capital croata
6 – Gastronomía de Croacia.
Eminentemente mediterránea, probar la comida croata es otra de esas razones por las que se debería hacer un viaje a este país. Con grandes influencias de Italia, especialmente en la zona de Istria donde abundan las pizzerías y la pasta con trufa blanca de la región. La cocina griega triunfa en el sur. Devorar Croacia es un placer. Aceite de oliva, buenos vinos, gran variedad de quesos, pescados y mariscos, la mejor manera de degustar la comida local es en las tabernas con mesas y bancos de madera al aire libre que abundan por los centros de la ciudad, generosos con la cerveza.
Platos típicos de Croacia son el jamón ahumado de Dalmacia, la carpa frita y el Brodet, un plato de arroz con pescado en los pueblos y ciudades marineras. En las zonas de interior o la capital, Zagreb, los platos tienen un toque más austrohúngaro, siendo la carne protagonista: el ricet, sopa de alubias con ternera o el delicioso strukli, una especie de lasaña croata también en versión vegetariana. Estas son algunas de las propuestas culinarias que nos sorprenderán a la hora de viajar por Croacia.
Pizza y cerveza en Croacia
¿Viaje organizado a Croacia o por libre?
Yo viaje a Croacia por mi cuenta, usando transporte público -autobuses de línea y, de Dubrovnik a Zagreb, un vuelo interno-. Al ser un país turístico está muy bien preparado, es bastante sencillo moverse y en general se habla inglés así que no suele haber problemas de comunicación. Sólo hay que dejarse llevar ¡y disfrutar de las bondades del país croata! ¿Sabes? Si estoy deseando volver, por algo será…
Escalera del paseo de la «vergüenza» de Cersei en Dubrovnik
Más información en la web de Turismo de Croacia.
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Angelina
Amo Croacia